Blog
Luis Carlos Fournier para El Observador
En entregas anteriores hemos conversado sobre el endeudamiento y lo importante que es para los deudores conocer las condiciones de sus deudas en términos de plazo, garantías y tasa.
El plazo y la tasa determinan el monto de la cuota y por ende son las principales variables por considerar a la hora de analizar opciones de financiamiento. Les siguen otros cargos y comisiones como seguros, comisiones de formalización y cargos por pago anticipado.
También hemos comentado como la tasa de interés es el precio que pagamos al acreedor por el dinero que nos prestó; y que la diferencia entre la suma de todas las cuotas y el monto que nos prestaron será el monto total pagado en intereses, obviando cargos por mora o seguros y otros cargos usualmente menores.
Muchas veces los deudores no conocen la tasa del crédito. Cuando se les consulta responden “la tasa no me la sé, pero pago 70 mil al mes”. Este desconocimiento los pone en una posición de desventaja a la hora de calcular el costo del préstamo y el eventual gasto en intereses.
Hoy quiero que hablemos sobre la estructura usual de las tasas de los créditos, cómo se ajustan, y cómo y cuándo impactan sobre los pagos que deben hacerse.
Les voy a presentar tres conceptos importantes alrededor de la tasa de interés de un crédito para un deudor.
Estructura
Deseo que tengan una idea general de cómo es que, usualmente, las entidades financieras establecen las tasas de las operaciones de crédito.
Por lo general, las tasas de los créditos son variables: suben o bajan de acuerdo con las condiciones del mercado y la fórmula estándar. Les prometo que no es compleja, es la siguiente:
Tasa de crédito (i) = Tasa referencia + spread
Al separar las partes de la tasa de interés en sus componentes básicos descubrimos que está formada por una parte fija y una parte variable. Esta parte variable es la que hace que las tasas suban o bajen.
El spread es la parte fija de la tasa de interés y no cambiará durante la vida del crédito. Este valor es establecido por la entidad financiera y obedece a sus políticas internas financieras, de riesgo y comercial y claro de rentabilidad.
La tasa de referencia es el componente variable de la tasa y será el que mueva la tasa para arriba o para abajo.
En Costa Rica, la Tasa de referencia que se utiliza con mayor frecuencia en las operaciones de crédito es la llamada Tasa Básica Pasiva (TBP), que publica el Banco Central de Costa Rica (BCCR). Se calcula considerando la tasa a la que captan (ósea la que pagan en las inversiones a plazo) las entidades financieras, como tal, cambiará conforme lo hagan estas tasas.
Un ejemplo de una tasa sería pues:
- Tasa de crédito (i) = Tasa referencia + Spread
- Tasa de crédito (i) = TBP + 10%
- Tasa de crédito (i) = 3,80% + 10%
- Tasa de crédito (i) = 13,80%
Algunas entidades financieras utilizan alguna otra tasa de referencia. Lo importante aquí para los deudores, es que independiente de qué tasa se utilice las entidades financieras deben indicar ambos componentes – tanto la tasa de referencia como el spread – en los contratos de crédito.
Nosotros como deudores responsables debemos siempre hacer las preguntas necesarias para entender la tasa que estaremos pagando. Es importante decir que las tasas de las tarjetas de crédito no se construyen igual y no suelen subir y bajar de acuerdo al comportamiento del mercado.
Ajuste de la tasa
Como ya vimos, la variación en la tasa de nuestro crédito vendrá por el lado del ajuste en la tasa de referencia ya que el spread es siempre fijo.
Suponiendo que la tasa de referencia sea la TBP, entonces la cuota de la operación de crédito cambiará conforme cambia esta tasa y esto cambia de acuerdo con la metodología de cálculo y de publicación de dicha tasa por parte del BCCR.
Siempre tenemos que estar atentos a los cambios en la TBP y en general al desempeño de la economía nacional e internacional. Ambas están estrechamente relacionadas y nos impactan directamente. Las variaciones en las tasas en los mercados internacionales afectarán las tasas nacionales, por lo que informarnos sobre lo que está sucediendo es una conducta responsable.
Nuestro patrimonio y nuestro flujo de caja dependen de las decisiones financieras que tomemos. Con esto no quiero decir que seamos todos economistas, pero leer información financiera de fuentes confiables sí es deseable.
Efecto de las variaciones sobre nuestro flujo de caja
Ahora bien, entonces, ¿cuándo es qué me cambia la cuota? Aquí la respuesta es: depende. Si bien es cierto que la tasa del crédito cambia cuando cambia la tasa de referencia, también es cierto que las entidades financieras establecen la política para reflejar el cambio en las tasas.
Esto puede ser en la siguiente cuota, cada tres meses u otra frecuencia. De nuevo esto lo debemos consultar cuando tramitamos un crédito.
¿Cuánto cambiará mi cuota? Veamos un ejemplo con la tasa que calculamos más arriba de 13,80% (tasa anual) y supongamos que solicitamos un crédito por ¢2 millones a 60 meses, nuestra cuota será de: ¢46.330.
¿Qué sucede si la tasa básica pasa de 3,80% a 3,60%? ¿Cuál es el efecto en mi cuota? El resultado de ajustar la tasa será una nueva cuota de ¢46.160 hasta que se vuelva a ajustar la tasa de referencia.
Entonces les recomiendo informarse sobre las condiciones de sus operaciones de crédito y mantenerse al tanto sobre lo que sucede en la economía, que al fin y al cabo incidirá sobre la cuota y sobre nuestras finanzas.
Luis Carlos Fournier es administrador de empresas Correo: [email protected] Instagram: @luisca72
Blog
