Krissia Morris Gray
Alrededor de 34 funcionarios del Hospital de Guápiles recibieron la vacuna contra covid-19, en situaciones anómalas.
Un total de 14 trabajadores que estaban disfrutando de sus vacaciones, llegaron a recibir la primera dosis.
A otros 20 funcionarios se les aplicó la vacuna, aunque no dan atención directa a pacientes con covid-19.
Estas situaciones fueron detectadas por la Auditoría Interna de la CCSS, que analizó el proceso de microplanificación y vacunación en el centro médico, entre el 11 y 14 de enero anterior.
La entidad auditora verificó la aplicación de 184 dosis en el periodo evaluado y se detectaron irregularidades en el proceso.
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“(…) se priorizó en los tres primeros días de la vacunación, al menos a 20 funcionarios de diversos servicios cuyas funciones sustantivas eventualmente no están de forma permanente relacionadas con la atención directa a pacientes covid-19, los cuales recibieron la dosis correspondiente antes que el personal de enfermería y otros trabajadores que laboran brindando atención en la unidad covid”, se desprende del informe AI-405-2021.
A esto añade que “ocasionando que funcionarios con menor riesgo de contagio fueran inoculados antes que otros que laboran en atención directa de pacientes positivos o sospechosos”.
La Auditoría de la CCSS detectó que más de 180 empleados de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) recibieron la vacuna en situaciones irregulares, por lo que se abrió la investigación correspondiente.
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Otros errores
También se identificaron, por lo menos, dos errores en la información incluida en el Sistema de Información de Vacunación (SIVA).
La digitación errónea de un número de cédula y la omisión del registro de un funcionario vacunado, lo que provocó que se presente una diferencia entre las dosis recibidas y las aplicadas por el centro médico, también fueron situaciones detectadas
“(…) es necesario que esa administración activa, conforme las potestades y competencias conferidas, valore los resultados expuestos al amparo del ordenamiento jurídico vigente, y efectúen las acciones inmediatas requeridas para el mejoramiento de los controles”.
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En este sentido, agregan los auditores de la CCSS, que las autoridades del Hospital de Guápiles deben hacer las investigaciones correspondientes para determinar la verdad real de los hechos.
“En caso de proceder, se establezcan responsabilidades, administrativas, legales o de otra índole, acciones que serán informadas oportunamente a este órgano de control y fiscalización”, puntualizaron los auditores.
Ante una serie de irregularidades identificadas en la primera fase de vacunación, la Auditoría Interna de la CCSS procederá a estar más de lleno en el proceso en el que se vacunan a personas de 58 años y más, en el que se da prioridad a los mayores de 80 años y más.
Krissia Morris Gray
