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7 recomendaciones para enfrentar problemas de liquidez

Luis Carlos Fournier para El Observador En ocasiones nos enfrentamos a problemas de liquidez, ya sea porque hemos quedado desempleados,…

Por Desde la Columna

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7 recomendaciones para enfrentar problemas de liquidez
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Luis Carlos Fournier para El Observador

En ocasiones nos enfrentamos a problemas de liquidez, ya sea porque hemos quedado desempleados, porque nuestros ingresos se han visto reducidos o porque nuestros gastos subieron de forma inesperada.

El crear reservas de emergencia nos ayuda a sobrellevar estas circunstancias de la mejor manera, y los insto a que empiecen a crear estas reservas.  

Sin embargo, hoy quiero exponerles algunas consideraciones que se deben tener presente a la hora de enfrentar problemas de liquidez sin reservas.

Es importante no entrar en pánico. A pesar de que la inestabilidad financiera es fuente de estrés, debemos tener cuidado de no tomar decisiones pensando solo en el corto plazo pues esto puede tener un impacto en el largo plazo.

Primero debemos tener un conocimiento de nuestras finanzas, en este caso, el tamaño de nuestros gastos y su importancia. Por ejemplo, pagar la cuota de la hipoteca suele ser de los rubros más importantes, seguida de los pagos de las escuelas, cuota del carro, pagos a las tarjetas, gastos de la casa como servicios públicos y comida.

El Internet y otros no vitales pueden ser servicios de streaming, cuotas de clubes, membresías y suscripciones… la lista no pretende ser exhaustiva ni es una recomendación de clasificación de gastos. Cada hogar determina la importancia relativa de cada uno de los gastos. Lo importante es que cada familia tenga claro cuales son sus prioridades.

Una vez con el panorama financiero claro las recomendaciones serían:

1.

Siempre pague las cuotas de los financiamientos.

Esto porque de fallar en los pagos se puede afectar nuestro récord crediticio y complicar la posibilidad de obtener nuevos créditos o refinanciar los actuales.

Acérquese a la entidad financiera y expóngales la situación; en algunas ocasiones y dependiendo del caso, la entidad puede aumentar el plazo o modificar la cuota, siempre buscando reducir la presión sobre el flujo de caja. Las entidades bancarias, en general, prefieren hacer arreglos de pago y seguir recibiendo algo de recursos a dejar de recibirlos del todo y tener que iniciar los procesos legales. 

2.

No financie gastos con la tarjeta de crédito.

Ante un problema de liquidez se suele recurrir a la tarjeta de crédito para atender algunos pagos, y debemos recordar que el límite aprobado en la tarjeta de crédito no es ingreso adicional y el saldo que dejemos en la tarjeta también se deberá pagar. Lo último que queremos es hacer crecer más los compromisos financieros y pasar de tener un problema de liquidez a tener uno de solvencia.

3.

Revisar la lista de gastos y recortar aquellos que no son vitales o necesarios

Para algunos hogares esto puede significar recortar los servicios de streaming, la membresía del club o incluso algunas clases o cursos no necesarias. Para otros serán el Internet, el capuccino diario de ¢3.000, o el club de fútbol; cada hogar toma su decisión considerando el tamaño de la urgencia.

4.

Sobre gastos que no se pueden recortar.

Para aquellos gastos que no se pueden recortar, por ejemplo, el alquiler, se puede hablar con el propietario del inmueble y revisar el monto mensual o el futuro incremento.

Otra opción es cambiar el lugar de residencia por otro más barato, acá habrá que considerar el tiempo en el que se puede realizar el cambio y los costos asociados con este cambio. No es opción dejar de pagar del todo, ya que esto puede afectar la relación con el propietario y generar una fuente adicional de estrés.

5.

Considerar la posibilidad de vender activos.

Se puede considerar la posibilidad de vender activos como casa o un vehículo. Esto hay que analizarlo a la luz del mercado; hay momentos en los que es más sencillo vender cosas, y otras en las que no lo es tanto, es importante asesorarse.

6.

Defienda su liquidez

Esto es: no utilice los fondos en efectivo con que cuente (liquidación, ahorros, u otros) de forma desordenada.

Si el período del problema de liquidez se anticipa corto (uno a dos meses) podría pagar algunas deudas para eliminar esas salidas futuras de efectivo; si el período es más largo tal vez sea mejor utilizar esos fondos para reservar el pago de marchamos o pólizas.

7.

No recurra a prestamistas

Ante todo: no recurra a prestamistas. Es común que ante situaciones de estrés se quiera solventar problemas de corto plazo con este tipo de préstamos, lo cual puede generar un problema mayor debido a la forma en la que suelen negociarse las condiciones; las tasas suelen ser mucho más altas que las del sistema formal y los plazos muy cortos.

Es importante indicar que, tan necesario es no entrar en pánico como el de no caer en la negación. Acepte que está en la situación que está en este momento y que esa circunstancia no lo define; busque consejo financiero y ayuda emocional.

Es muy importante mantener la mente clara y balanceada para evitar caer en más presiones.

Luis Carlos Fournier es Administrador de Empresas.
[email protected]