Marco Marín
Seis años después de que el Estado costarricense rompiera el contrato con la constructora brasileña OAS, para modernizar el trayecto entre San José y San Ramón sobre la Ruta 1, las autoridades anunciaron nuevos estudios de factibilidad para retomar la obra.
Uno de los detalles que generó mayor polémica en aquel entonces fue el tema de los peajes. Según estimaciones de OAS, cada conductor habría tenido que pagar ¢1.965 por sentido. Esto habría resultado en un total de ¢3.930 por un viaje de ida y vuelta
Ahora, nuevos datos elaborados por la firma IDOM Consulting revelan que ese monto pasaría a ser, aproximadamente, de ¢3.600. Es decir, ¢330 menos que la propuesta original.
Subvención estatal
Este monto se ve levemente reducido por el aporte que hace el Estado de $110 millones. Mientras tanto, el resto del balance ($670 millones) será sufragado con el cobro de peajes, según confirmó la directora de la Unidad Administradora, Hadda Muñoz.
Precisamente, los esfuerzos para acelerar la recolección de fondos de está partida llevaron a las autoridades a establecer nuevas tarifas de peaje en las estaciones de Naranjo y Río Segundo desde el pasado 9 de noviembre.
Según datos del ente administrador, desde la implementación de los nuevos montos la recaudación ha sido de unos ¢15 millones por día.
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Con recursos que se obtengan de la nueva estructura tarifaria aprobada, el Fideicomiso Ruta Uno -ente encargado del proyecto y manejado por el Banco de Costa Rica- afrontará las inversiones asociadas.
Estas son expropiaciones, reasentamientos y relocalización de servicios públicos, según explicaron las autoridades, y cuyos gastos se incluyen en la partida de $670 millones.
El primer gasto que se financiará con esta alza es la modernización de las casetas de peaje en estas dos estaciones y que, a partir del próximo año, van a incluir carriles para el pago electrónico.
Más estaciones de peaje
Posteriormente, el proyecto incluye un total de cuatro estaciones de peaje, en vez de dos, sobre la ruta principal, además de dos más en rampas de acceso, para poder “repartir” el costo final de forma más equitativa.
Dichos puntos no empezarían a operar hasta el 2025, cuando se espera que concluyan las obras.
La ingeniera achacó la similitud del monto, con el de OAS, a un aumento en el costo de la obra.
Lo defiende
“Entendamos lo siguiente. El vivir con el congestionamiento que tiene esta vía tiene un costo enorme para los usuarios, posiblemente mayor al costo del peaje. Debemos comprender que si no se utilizan metodologías, de esta naturaleza, ante la imposibilidad del Estado de aportar para obras de esta magnitud, estaríamos castigados.
“No solamente por el uso de vehículos, como la contaminación ambiental y la salud o el factor familia”, argumentó el ministro de Obras Públicas y Transportes, Rodolfo Méndez, ante una consulta sobre el precio final.
Posteriormente, y ante una pregunta de El Observador, el jerarca afirmó que el monto total del peaje, por kilómetro, sería más barato que el estipulado hace 20 años en la ruta 27.
“El peaje de la carretera a Caldera se estableció en el 2000. Hace 20 años y era de cinco centavos de dólar, por kilómetro. Este está para cuatro centavos, un poquito más bajo y recordando que va a requerir una ampliación”.
El jerarca agregó que, además de los trabajos que ya se contemplan, el proyecto incluye una ampliación en 25 años. Sobre los aportes estatales, Méndez aseguró que no habría más.
No obstante, aceptó que los recursos remanentes de un préstamo hecho por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en abril del año pasado, podrían ser utilizados para las intersecciones de El Coyol, Río Grande y en Naranjo, cerca de la Fábrica Nacional de Licores.
¿Qué incluye?
El proyecto busca ampliar a ocho carriles (cuatro en cada sentido) el trayecto entre el puente Juan Pablo II, en La Uruca, y el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, en la entrada a Alajuela.
Desde ese punto, hasta San Antonio del Tejar, la autopista pasa a seis carriles (uno menos por sentido). El tramo que va hasta San Ramón contaría con cuatro carriles, dos en ambas direcciones.
Estos trabajos involucran la ampliación de 10 puentes, además de los 17 proyectos del Programa de Obras Impostergables (OBIS). De ellas, cuatro están en ejecución, desde marzo, mientras que dos más fueron anunciadas esta semana.
Las que ya están en proceso de ejecución son las ampliaciones de los puentes sobre los ríos: Alajuela, Ciruelas y Segundo. A estas se agregan el ensanchamiento de la intersección cerca de la fábrica Firestone, en la Ribera de Belén y un nuevo conector en el cruce de Barreal-Castella.
Por su parte, según anunciaron las autoridades este miércoles, en abril del 2022 estarían listos el nuevo puente sobre el río Torres (cercanías del hotel San José Palacio) y una nueva intersección en el Monumento al Agua en la Circunvalación.
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El primer grupo de OBIS representa una inversión de $25 millones, mientras que las dos más recientes se estiman en $17.5. Según la información brindada por el Fideicomiso Ruta 1, estas se financian con la partida de $110 millones que aporta el Estado.
Según datos del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), por esta ruta transitan más de 145.000 vehículos por día.
Marco Marín
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