Tomás Gómez
La Comisión Legislativa de Asuntos Económicos este martes el primer paso para postegar la entrada en vigencia del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en las actividades turísticas y evitar un golpe mayor al sector, uno de los más golpeados por la crisis de la COVID-19.
El gravamen entraría a regir el próximo 1 de julio por un 4% y se iría incrementado de forma gradual hasta alcanzar el 13% en 5 años, pero el nuevo plan pretende atrasar por un año la fecha de implementación.
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Se trata de una iniciativa del diputado liberacinionista Roberto Thompson quien destacó que es necesario mejorar el panorama de recuperación para este pilar de la economía.
“Estos cambios en la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas permitirán que el sector turismo trate de recuperarse y así enfrentar el difícil proceso de reactivación en mejores condiciones”, dijo el legislador.
Tras este primer aval será ahora el Plenario el que definirá el futuro de la iniciativa.
Salvavidas para el turismo
Las actividades turísticas generan 211.000 empleos directos y cerca de 600.000 indirectos y para el 2019 aportaron cerca del 8% del Producto Interno Bruto.
El gremio, sin embargo, entró en un congelamiento con la llegada de la pandemia tanto por el cierre de fronteras como por la limitación de actividades dentro del mismo país.
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Datos del Ministerio de Trabajo muestran que hasta la semana pasada 20.411 contratos en el sector habían sido suspendidos mientras que a 26.083 personas se les había reducido su jornada.
