Hermes Solano
El Barcelona se metió en la final de la Copa del Rey al imponerse 3-0 al Sevilla, tras jugar 120 minutos en el partido de vuelta de semifinales del torneo, levantando así el 2-0 adverso que había sufrido en la ida.
Ousmane Dembélé abrió el marcador al minuto 12’ y Gerard Piqué puso el 2-0 en el tiempo de descuento para llevar el duelo a la prórroga. Allí, Martin Braithwaite marcó de cabeza el 3-0 al 95’, que dio al Barça el pase a su séptima final de Copa desde 2014.
El Barcelona tiró de orgullo para remontar el 2-0 en contra cosechado en la ida ante el Sevilla, que jugó con 10 hombres toda la prórroga por la expulsión de Fernando por doble amonestación.
El conjunto culé, el ‘rey de Copas’, jugará por su trofeo número 31 el próximo 13 de abril en el estadio de la Cartuja de Sevilla frente al vencedor del duelo que disputarán el jueves el Athletic de Bilbao y el Levante (1-1 en la ida).
De paso, esta victoria y remontada supone una inyección de moral con miras a la vuelta de octavos de final de la Champions el miércoles en París, donde tendrá que intentar levantar el duro 4-1 de la ida.
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