Tomás Gómez
Aunque Iota pasó de huracán categoría 5 a tormenta tropical sus lluvias siguen representando una amenaza para Centroamérica.
El Salvador es uno de los países amenazados y como medida de prevención el presidente Nayib Bukele decretó el “Día Nacional de la Oración”.
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“Unámonos en oración, para que Dios sane nuestra tierra y nos libre de todo mal”, indicó el mandatario en sus redes sociales.
Bukele insistió en que la medida era voluntaria y que se celebraría en todo el país.
A las 7:00 pm, otra vez mediante redes sociales, Bukele convocó a empezar las oraciones.
Semanas de huracanes
Las dos semanas anteriores dejaron una estela de destrucción en Centroamérica debido a los huracanes Eta y Iota.
El primero dejó más de 200 muertos e inundaciones desde Costa Rica hasta Guatemala.
Con suelos saturados y aumento de la vulnerabilidad en las últimas horas le tocó el turno a Iota.
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La costa caribeña colombiana, las islas de San Andrés y Providencia así como el norte de Nicaragua llevaron la peor parte.
El huracán alcanzó la categoría 5 -la más alta- pero al tocar tierra y cruzar la región se fue degradando hasta tormenta tropical.
Los expertos monitorean ahora una nueva formación en el Caribe Sur que aún mantiene bajas posibilidades de evolucionar pero que tiene el potencial para mantener las lluvias.
