Esta semana el gobierno convocó a sesiones extraordinarias el proyecto de ley 21.658 Ley de Regulación de los Vapeadores y Cigarros Electrónicos con el cual busca poner un impuesto del 40% sobre la base imponible de los productos relacionados.
Dicha maniobra generó sorpresas en el sector comercial, el cual aseguró que esta iniciativa incrementará la informalidad y el comercio clandestino, según manifestó el director ejecutivo del Observatorio de Comercio Ilícito de la Cámara de Comercio de Costa Rica, Jairo Mena.
“Una alza de precios derivada de este tipo de impuestos, desencadenará un ambiente atractivo para que productos de contrabando de esta categoría entren al mercado con estándares de calidad desconocidos y con problemas de seguridad.
“A todas luces, no entendemos cómo el Ejecutivo convoca a sesiones extraordinarias un proyecto para crear un tributo (…) nos encontramos enfrentando una situación sin precedentes, que podría afectar el ambiente de inversión, con la aprobación de normas que presentan serias deficiencias técnicas, agregó el vocero.
Mena explicó que la actual redacción del proyecto y sus alcances, abarcan una serie de bienes que no se consumen, como lo son el dispositivo y los cargadores, por lo que no deberían de ser gravados.