Tomás Gómez
Carlos Alvarado afirmó está tarde que conversó con el diputado Welmer Ramos para pedirle que cumpla su compromiso de renunciar.
La Procuraduría de la Ética Pública (PEP) denunció esta mañana que Ramos pudo hacer cometido tráfico de influencias en los casos del cemento chino y Coopelesca.
“Recién en la tarde conversé con él y yo espero que conforme lo ahí firmado el cumpla”, dijo el mandatario.
Alvarado insistió en que la renuncia debe darse como parte de los compromisos de campaña y para mantener la credibilidad.
Según el Presidente, Ramos le prometió ver el expediente.
Aferrado al puesto
Tras la publicación de la denuncia, el legislador Ramos -quien ocupó el Ministerio de Economía (MEIC) en la administración de Luis Guillermo Solís- negó cualquier posibilidad de renunciar al puesto.
Alegando que aún no existen hechos demostrados en su contra, Ramos optó únicamente por dejar su inmunidad como parlamentario.
“La Procuraduría solo dice que se investigue y tiene que haber un órgano a lo interno de cada institución para investigar a fondo, en este caso, tiene que ser el Ministerio Público el que tiene que ver el caso”, declaró el diputado.
Agregó que “cuando se demuestre que los hechos son como se dice (renunciará), uno no puede renunciar por posibilidades que ni siquiera me dan a mí el chance de demostrar que no es esa las relaciones de hecho”.
Traslado a Fiscalía
De acuerdo al comunicado compartido por la PEP, sus investigaciones tras el trabajo de análisis hecho por la comisión legislativa de análisis sobre los casos de Sinocem y Coopelesca y las operaciones crediticias gestionadas y otorgadas por el Banco de Costa Rica, el Banco Popular y de Desarrollo Comunal y otras entidades bancarias del Estado.
La denuncia pasa ahora a la Fiscalía General de la República para continuar su trámite.
