Ciberseguridad, tendencias y desafíos para el sector financiero

Allan Calderón Moya/ Subgerente General Crédito y Riesgo, Banco Nacional

La era digital abre un abanico de enormes oportunidades como mejorar la experiencia de los clientes y la eficiencia de las organizaciones; también, involucra desafíos que a través de la ciberseguridad se deben enfrentar.

El uso intensivo de tecnologías como los servicios en la nube, dispositivos móviles y redes sociales, han cambiado los hábitos de consumo y han desvanecido las fronteras entre lo físico y lo digital. Emergen y se consolidan modelos de negocios que integran técnicas de analítica de datos para generar ofertas de alto valor, personalizadas y accesibles desde los dispositivos que el consumidor prefiera.

Los servicios financieros no son ajenos a esta realidad y destaca la aparición de nuevos actores enfocados en brindar servicios con una exigua presencia física y un uso intensivo de las tecnologías. 

En este entorno, las vulnerabilidades se multiplican, de acuerdo con el World Economic Forum, se calcula que para el 2021 el costo global de las trasgresiones a la ciberseguridad superará los US$6 mil millones, duplicando la cifra del 2015. 

Para las organizaciones la ciberseguridad no es opcional y necesita ser un habilitador clave del proceso de digitalización. Integrar la ciberseguridad a la estrategia organizacional, ofrece la oportunidad de gestionar la confianza de las partes interesadas y alcanzar el nivel de resiliencia deseado.

La delincuencia cibernética tiene dentro sus objetivos apropiarse de información confidencial. Hoy, la principal táctica empleada por los ciber delincuentes es la Ingeniería Social (el arte de obtener información a través de la manipulación de usuarios legítimos), aplicada a través de: Correos electrónicos maliciosos, suplantación de identidades vía llamadas telefónicas o redes sociales y SMS. 

Un segundo mecanismo utilizado es el uso de herramientas tecnológicas: Programas maliciosos, direcciones de correo electrónico falsas o robadas, páginas Web falsas o manipuladas, app´s para ocultar o enmascarar el número telefónico desde donde realmente se origina la llamada y la instalación de software especializados para controlar remotamente el equipo.

Ante tales amenazas y en un entorno que reconoce la inclusión financiera como mecanismo clave para gestionar las políticas de desarrollo, es imperativo que la sociedad en general conozca y aplique prácticas dirigidas a evitar ser víctima de la ciber delincuencia. Algunos consejos aplicables al uso de servicios financieros son:

1. Realice sus transacciones estando conectado únicamente en redes de internet seguras y verifique que nadie ajeno a usted logra ver a donde ingresa y las credenciales que utiliza para accesar a los sitios deseados.
2. No suministre a nadie, sea por email, SMS o llamada telefónica, números de cuenta ni tarjeta, contraseñas o códigos de confirmación remitidos por mensajes de texto, PIN del cajero automático y demás mecanismos de autenticación.
3. Si recibe correos electrónicos o mensajes de texto con promociones u ofertas, verifique quien las envía, no realice clic en los enlaces o archivos adjuntos, visite el sitio oficial o contacte directamente a la empresa.
4. Sea precavido ante ofertas o promociones aparentemente “únicas” y que se deben adquirir de inmediato para recibir eventuales beneficios, no crea en todo lo que observa o le ofrecen.
5. Evite registrar sus datos personales y medios de contacto en sitios web desconocidos o aplicaciones de dudosa procedencia.
6. En caso de que requiera utilizar una aplicación específica para realizar sus compras, descárguela de las tiendas oficiales.
7. El uso de tarjeta virtual es un medio para realizar sus compras en línea vía Internet de una forma más segura.