Por Andrés Alfaro para El Observador
En esta época del año donde predominan los días lluviosos y hacemos ciclismo bajo la lluvia, son necesarios algunos cuidados para nuestra seguridad.
Uno de los mas importantes es mantenerse visible. La lluvia tiende a reducir la visibilidad, tanto para conductores como para ciclistas. Siempre lleve ropa con colores brillantes y un chaleco reflexivo.
Use las luces reflectoras, especialmente en horas tempranas de la mañana o a últimas horas del día. Trate de hacer contacto visual con los conductores, especialmente en las intersecciones.
Desinfle levemente las ruedas. De esa manera habrá más superficie en contacto con el asfalto y dará mayor agarre.
Los frenos de la bicicleta probablemente no funcionen al 100% por lo que es importante tomar un momento para detenerse y “limpiar” las pastillas de freno.
Sea precavido respecto de objetos de metal como placas de construcción en el camino y tapas de excavaciones de servicio. Serán más resbaladizas. La humedad puede tener el mismo efecto en algunas de las líneas pintadas en el pavimento.
Los charcos también son peligrosos, especialmente si no se puede determinar su profundidad. Si no puedes evadir un charco, baje la velocidad y pase.
Al andar en bicicleta bajo la lluvia generalmente se diluye el lubricante de la cadena. Como mínimo, limpie la cadena y aplique más lubricante después de circular bajo la lluvia. Con el transcurso del tiempo, la humedad puede hacer que algunas partes se oxiden.
Utilice lentes claros o amarillos como los que se utilizan en las madrugadas, estos a la hora de mojarse nos permiten ver más que unos oscuros.
Recomendaciones:
- Recordar que la calle está resbalosa por los aceites y líquidos que dejan los carros.
- Disminuir la velocidad bajo la lluvia, no es lo mismo que cuando la calle esta seca.
- Darle un adecuado mantenimiento a la bicicleta después de entrenar con lluvia.
- En una tormenta muy fuerte es mejor resguardarse y luego continuar, principalmente por la rayería.
- Usar lentes claros para tener mayor visibilidad y evitar que el agua nos moleste en los ojos.
- Llevar una luz tanto en la parte trasera de la bicicleta como adelante.
- Llantas y neumáticos en buen estado con un buen agarre al asfalto. Esto nos permitirá ir más seguros en las partes con aceite o charcos de agua.
- Unos buenos guantes, recuerde que cuando nos caemos en bici, la mayoría de las veces ponemos la mano de primero. Además un buen guante con gel nos permitirá agarrar armas fuerte la manivela.
Andrés Alfaro es entrenador certificado de Ironman y propietario de Just Training.
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