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Cobertura del Seguro Obligatorio de Automóviles debe subir para mejorar atención de accidentes, afirma Sugese

La cobertura que ofrece el Seguro Obligatorio de Automóviles (SOA) en caso de accidentes en carretera podría llegar a ser…

Por Rodrigo Díaz

Tiempo de Lectura: 4 minutos
Cobertura del Seguro Obligatorio de Automóviles debe subir para mejorar atención de accidentes, afirma Sugese
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La cobertura que ofrece el Seguro Obligatorio de Automóviles (SOA) en caso de accidentes en carretera podría llegar a ser insuficiente si en el futuro cercano no se aumenta el monto.

Actualmente, dicho seguro básico cubre hasta un máximo de ¢6 millones. Esto incluye la atención de gastos médicos, además de prestaciones económicas por incapacidades temporales, invalidez y hasta la muerte.

En casos especiales, como menores de edad o por el grado de incapacidad del accidentado, la cobertura podría duplicarse, es decir, alcanzar los ¢12 millones.

Sin embargo, estos montos se han mantenido sin variaciones desde 2010. La cifra no la determina Sugese, sino que se establece mediante decreto ejecutivo, según determinó la actual Ley de Tránsito.

También estableció que el monto debe variar en caso de que no cubra al menos el 90% de los costos de atención del 100% de los accidentes.

Hace unos cuatro años, la cobertura era total en aproximadamente un 97% de los casos; sin embargo, en el último año este porcentaje cayó a un 92%, según señaló Tomás Soley, superintendente de Seguros.

“La Sugese ha estado advirtiendo desde hace 6 o 7 años que se hace ese estudio, que año a año ha ido reduciéndose la cobertura. Esto por diferentes razones, como la inflación en el costo de los servicios médicos y la mayor siniestralidad”, apuntó Soley.

A setiembre de 2021, hubo un total de 19.936 accidentes reclamados, un aumento de 13% con respecto al 2020, año en el que hubo muchas restricciones de circulación por la pandemia.

¿Qué pasa cuando la atención sobrepasa los ¢6 millones? Debe ser asumida por la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). Según un estudio de Sugese, publicado en 2019, la CCSS cubrió el 19% del costo total de las lesiones.

Para Soley, los conductores deben asumir el riesgo y no la Seguridad Social. Igualmente, opinó que es importante que la CCSS depure su información para conocer cuál es el costo real que asume por los casos de accidentes de tránsito.

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Por todo lo anterior, el jerarca de Sugese recomienda una revisión para que dicha cobertura aumente y no esperar al límite de atención definido por la ley. Esto porque un alza abrupta de la cobertura tendría un impacto en las tarifas del seguro, uno de los rubros más importantes del marchamo.

Actualmente, este seguro equivale a aproximadamente la quinta parte del monto promedio del derecho de circulación.

El superintendente recordó que una cobertura más amplia reduce la exposición del dueño del vehículo, quien es solidario en caso de accidente.

“La realidad es que los seis millones de cobertura son insuficientes. Permiten atender a la persona accidentada en su parte médica, pero si la persona quedó lesionada de por vida, el dueño del vehículo es responsable de esos daños y tiene que hacerle frente”, señaló el regulador.

“La Sugese ha estado advirtiendo que año a año ha ido reduciéndose la cobertura”, afirmó Tomás Soley, superintendente de Seguros (cortesía Sugese)

Seguro pionero

El seguro obligatorio automotor se creó en la década de los años 70. Costa Rica es pionero en la introducción de ese seguro en América Latina. A nivel mundial, eran pocos países en el mundo que lo ofrecían.

Vino a solucionar un problema de salud pública, pues de esta manera ya se podían reparar los daños por un accidente de tránsito sin someter a las víctimas a un tortuoso proceso judicial.

Por medio del SOA se logra financiar la atención médica de las personas lesionadas tanto dentro del vehículo como los de los otros vehículos involucrados, o incluso un tercero (por ejemplo, un peatón, un ciclista que se vio afectado con el accidente).

De esta forma, se puede lograr la atención médica oportuna luego de ocurrido el siniestro.

“El SOA es insuficiente, pero es lo mejor que tenemos. Fue un seguro pionero en América Latina, y requiere buscarle unas mejoras para que sea un elemento de seguridad vial que permita mejorar el comportamiento en carretera y que permita una mayor protección hasta del patrimonio propio”, expuso Soley.

En cuanto a las tarifas para el 2022, el SOA tuvo un incremento de 0,3% en promedio, presentando un aumento de 4,6% en vehículos particulares. Las motocicletas pagan la prima más alta, debido a la accidentalidad de ese medio de transporte.

Según Soley, diferenciar la tarifa por tipo de vehículo es una buena práctica que se aplica en el país y que puede ayudar a dirigir comportamiento.

Una población con una mejor educación y una mejor infraestructura vial, ayudará a reducir los accidentes, lo que evitará hacer uso del seguro.

 

Abierto a la competencia

Con la apertura del mercado de seguros, el SOA estuvo incluido dentro de los compromisos para permitir que otras empresas pudieran ofrecer este seguro, además del INS.

Sin embargo, por ahora no ha habido apetito de riesgo en el mercado.

Una de las barreras de entrada puede ser la forma en que está definido el cobro del marchamo, de acuerdo con Soley. Actualmente, la misma entidad aseguradora que provee el SOA es la que se encarga de recaudar todo el marchamo completo.

Si en vez de que sea la aseguradora, el cobro lo hacen diferentes agentes recaudadores, éstos podrían ofrecer al público pólizas distintas para esa cobertura.

Otro elemento es la baja rentabilidad que tiene el SOA en comparación con los riesgos de otros seguros. De hecho, se estableció un margen de utilidad que, cuando se supera, genera una compensación a la CCSS. No obstante, desde que se introdujo la ley, solo se ha entregado el excedente en dos ocasiones.

Para el superintendente, el que no haya un solo oferente podría ser interesante hasta para el mismo proveedor del seguro, pues en muchas ocasiones se le responsabiliza injustamente por el monto de todo el marchamo.