Por Lorna Peraza para El Observador
Tan natural como observar a una mariposa descansando en la rama de un árbol o hacer rebotar una pelota en el piso, los niños se sorprenden con cosas simples que los adultos a menudo dan por sentado. Desde el momento en que nacen, los niños tienen una curiosidad innata y se llenan de una sensación de asombro. Cada nueva experiencia les brinda oportunidades para que aprendan sobre el mundo. Su tarea es dar sentido al mundo que los rodea, constantemente, experimentando, explorando y descubriendo.
Los niños son naturalmente curiosos sobre el mundo y el cómo funcionan las cosas. Esto significa que se acercan naturalmente al mundo con la misma curiosidad requerida para aprender y explorar los fundamentos de STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas por sus siglas en inglés). Por ejemplo, cultivando sus propias frutas o construyendo un puente con bloques, los niños recopilan datos, comienzan a desarrollar estrategias, resuelven problemas y aprenden a ajustar su enfoque cuando las cosas no salen como se esperaba.
¿Listos para el futuro?
La investigación ha demostrado que el impulso de explorar, interactuar y observar comienza en la primera infancia, mucho antes de la escuela. Al mismo tiempo, la economía mundial se está moviendo hacia las industrias con bases tecnológicas, creando un crecimiento en la demanda de trabajadores con formación en STEM. La pregunta es; ¿Cómo podemos nosotros, como padres y maestros, cultivar una generación de adultos que esté preparada para prosperar en la economía del siglo XXI? ¿Cómo preparamos a nuestros hijos para profesiones que aún no se han creado?
Una parte importante de esta respuesta yace en la primera infancia. Las semillas de STEM deben plantarse temprano, junto con las semillas de la alfabetizació: aprender a hablar, leer y escribir. Juntos, estos hilos de aprendizaje entrelazados se van a potenciar mutuamente y los niños crecerán como ciudadanos preparados para un mañana digital. De hecho, justo cuando la revolución industrial hizo necesario que todos los niños aprendieran a leer, la revolución tecnológica ha hecho que sea fundamental para todos los niños ser competentes en STEM.
Por esa razón los gobiernos en la Unión Europea y de los EEUU están empezando a fomentar la educación early STEM (educación STEM temprana). Hasta que todas estas ideas ambiciosas se materialicen e inspiren a Costa Rica, ¿hay algo que podamos hacer nosotros mismos como padres y maestros? ¡La respuesta es sí! Este artículo explica cómo volverse un papá o una mamá STEM en cinco sencillos pasos:
- Familiarízate con early STEM. Los padres son la puerta de entrada más directa al aprendizaje de STEM para niños pequeños. Muchos de ellos, sin embargo, experimentan inseguridad sobre los temas de STEM y creen que STEM es solo para niños mayores o de inteligencia superior.
- Inicia cuanto antes. Las primeras experiencias de un niño literalmente dan forma a cómo se construye el cerebro. Una base sólida en los primeros años aumenta la probabilidad de buenos resultados en la escuela y su desarrollo de habilidades sociales y emocionales importantes para la mañana digital.
- Asume un rol proactivo. Es muy importante entender que tu papel como padre es crucial para dar acceso al early STEM. Normalmente comenzarás explicando y/o simplemente verbalizando los fenómenos STEM que ve o experimenta tu hijo o hija, luego le ayudarás a construir un vocabulario STEM y, finalmente, le proporcionarás los juguetes adecuados para que se desarrolle solo. Recuerda que los niños requieren orientación y asistencia con nuevas ideas.
- Busca juguetes adecuados. Tal vez se preguntan ahora algo como ¿No sé si entendí bien, tengo que pasar cada minuto libre a partir de ahora al lado de mi hijo introduciéndole al early STEM? Seamos realistas: no es posible. Para eso existen los juguetes STEM: los niños aprenden jugando. A través del juego, los niños integran emociones, resuelven problemas, aprenden el lenguaje y desarrollan su imaginación. Aprenden a interactuar y comunicarse con los demás
- Disfrútalo. El principio más importante en early STEM es disfrutar y compartir el entusiasmo con tu hijo. Identificar y profundizar, por medio de una ruta de aprendizaje, en los temas que a ambos les gustan. Disfrutar el tiempo que pasan juntos. Incluso aprender a ver el mundo desde el punto de vista de los niños.
Lorna Peraza es Directora de Genius Lab
https://www.facebook.com/geniuslab.us/