Elizabeth Rodríguez
Las personas con orden sanitaria -ya sean confirmadas o sospechosas por COVID-19- que vivan en un condominio y que hagan caso omiso al aislamiento social por rondar en las áreas comunes, se exponen a una multa de ¢2 millones y una pena por cárcel que va desde los 24 meses hasta los 3 años.
Los espacios comunes involucran áreas verdes, casas club, azoteas, jacuzzis, gimnasios y ranchos. Las personas con orden sanitaria no pueden caminar ni pasear a sus mascotas en los alrededores ya que incumplirían con la directriz.
El ministro de Salud, Daniel Salas, aclaró que en caso sospechoso o confirmado, se hará el levantamiento de casos cercanos, así como la orden sanitaria para los mismos.
Las personas que residan en el condominio, deberán indicar a la administración si se sospecha de haber contraído el virus. Así mismo, se puede llamar al 1322 para cualquier duda que se tenga al respecto.
La administración del condominio tiene la obligación de reforzar la limpieza de las áreas donde exista mayor contacto, como perillas, barandas, portones, ascensores, entre otros. Los espacios recreativos como ranchos, piscinas y parques de niños deben estar cerrados hasta nuevo aviso por parte de las autoridades de salud.
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Elizabeth Rodríguez
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