Paula Ruiz
La Asamblea Legislativa aprobó, en primer debate, una rebaja de ¢36.000 millones para la deuda política de las elecciones para presidente del 2022 y la de alcaldes del 2024.
El plan contó con el respaldo de 43 parlamentarios mientras que dos votaron en contra. El desembolso para deuda política pasará de ser del 0,19% del Producto Interno Bruto (PIB) al 0,085% del PIB.
La iniciativa se tramitó mediante el número de expediente 22.177 y fue impulsado por el liberacionista Gustavo Viales.
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Rodríguez sumó críticas a la iniciativa al asegurar que la disminución de recursos para este fin afectan la democracia.
“La democracia tiene precio y hay que garantizarla con fondos públicos y quienes somos limpios sabemos que cada vez cuesta más obtener recursos”, dijo.
A la vez, aseguró que los recortes “benefician a algunos y afectan a otros que están surgiendo”.
En contraparte, Viales negó que con esta reducción de dinero, se atente contra la democracia y el acceso a fondos públicos para los partidos políticos.
El proyecto fue elaborado en conjunto con el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), resaltó el liberacionista.
Más reducción
Dentro de las mociones que se votaron este miércoles, había un planteamiento del diputado José María Villalta para reducir aún más el aporte estatal en estas campañas.
Villalta impulsó que la reducción fuera hasta en 0.75% que permitiría un ahorro adicional de ¢2.500 millones.
Sin embargo, no prosperó por la falta de apoyo legislativo necesario pese a las voces que instaron su aprobación al repercutir en más ahorro para el Estado.
Ahora bien, aunque la iniciativa pretendía reducir la campaña electoral para que los partidos políticos no tuvieran tanto gasto, al final fue eliminado.
“Para generar consenso tuvo más viabilidad bajar más el monto y deja del mismo periodo de reconocimiento”, sentenció Viales.
El próximo martes será sometido a votación en segundo debate.
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