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Costa Rica registra una reducción de los embarazos de adolescentes

Desde el 2015 y hasta el 2019 se ha registrado una disminución en el embarazo adolescente en Costa Rica. En…

Por Elizabeth Rodríguez

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Costa Rica registra una reducción de los embarazos de adolescentes
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Desde el 2015 y hasta el 2019 se ha registrado una disminución en el embarazo adolescente en Costa Rica.

En promedio, son mil nacimientos menos cada año provenientes de una niña menor a los 19 años. Lo anterior se desprende de datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

Entre el 2015 y el 2019 se ha reportado una reducción desde los 11.610 a los 8.040 embarazos. Esto representa 3.570 nacimientos menos en cuatro años. En el primer semestre del 2020 se observó un total de 3.184 mil embarazos.

“El segundo semestre del año es usualmente donde hay mayor cantidad de nacimientos en el país, el 15% de la totalidad. Sin embargo, se mantiene la baja promedio que hemos visto los últimos años”, explicó Nineth Alarcón, especialista en el tema.

El 26 de setiembre se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Embarazo Adolescente. Según Alarcón el secreto para esta disminución ha sido conversar más sobre el tema y eliminar el tabú.

“La principal prevención es una buena comunicación en la familia. La adolescencia debería de ser una etapa de desarrollo y formación, y no el momento para ser madres”, aseguró la especialista.

De los 8.040 casos en el 2019, 264 fueron embarazos en menores de 15 años, contra 7.776 nacimientos en muchachas entre los 15 y los 19 años.

El embarazo en menores de 15 años acarrea complicaciones en el momento del parto así como en el pre-parto con padecimientos como presión alta, desnutrición, o incluso casos de prematuridad. (Archivo)

Autoestima y educación sexual

Para Liliana Mejías, trabajadora social del Área de Salud de Aserrí, no es normal que una adolescente tenga relaciones sexuales, pero sí es normal que se hable de temas sexuales en la casa.

“Erróneamente les llamamos madres adolescentes pero ellas son todavía niñas de 13-14 años. Cada una de ellas tiene sueños y necesidades, y generalmente las tratamos como adultas, pero no es así”, agregó Mejías.

La clave está, continuó, en fortalecer su autoestima, la educación sexual desde los centros educativos pero también desde el hogar para así fortalecer sus proyectos de vida y que no tengan un segundo embarazo.

Para esto se crea una red institucional entre los Cen-Cinai, el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), el Ministerio de Salud, y el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) a través de la Junta de Protección a la Niñez y la Adolescencia.

En tiempos de pandemia, los espacios entre las adolescentes se realizan de manera virtual donde se han fortalecido chats como los de WhatsApp donde se apoyan entre ellas mismas enviando fotografías y compartiendo su maternidad.

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