Paula Ruiz
La Cámara de Comercio Exterior (Crecex) se sumó a la petición realizada por la Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (Cacia) para que el Ministerio de Trabajo registre los hechos de violencia, así como los llamados a ejercerla, por parte de los sindicatos.
Ambas agrupaciones señalan que dichos actos pueden conllevar a la disolución de sindicatos, según lo establece la Ley en el artículo 350 del Código de Trabajo.
En la petición de Cacia se le solicitó al ministro de Trabajo, Steven Núñez, la designación de personal de la Dirección de Asuntos Laborales, para recopilar la información necesaria, que recaiga en posibles hechos delictivos en las manifestaciones gremiales.
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Para el presidente de Crecex, José Manuel Quirce, ya es momento de que las autoridades tomen acciones, por lo tanto, hizo un llamado a Núñez a respetar el ordenamiento jurídico.
“Se han estado lanzando llamados por parte de conocidos dirigentes sindicales a realizar actos que podrían calificar como delitos o incluso que podrían derivar en hechos violentos y no es posible que tomemos esto a la ligera”, dijo Quirce.
Antecedentes
El 3 de setiembre anterior, cuando los sindicatos se manifestaron en las afueras de la Asamblea Legislativa, en contra del proyecto de ley sobre huelgas, personal de prensa fue agredido.
El periodista Marco Marín, de El Observador y el fotógrafo de La Nación, John Durán, fueron agredidos, incluso por líderes sindicales.
Así mismo, Albino Vargas, reconocido sindicalista que lidera la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (Anep) fue denunciado ante la Fiscalía por instigación al orden público.
Lo anterior, por promover el bloqueo de calles principales como la ruta 27 y Ochomogo, así como el cierre de fronteras.
