Portada

Diputada María Inés Solís: no deberíamos aplicar un tope de usura

La diputada del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), María Inés Solís, no esconde su preocupación por las altas tasas de…

Por Manuel Sancho

Tiempo de Lectura: 4 minutos
Diputada María Inés Solís: no deberíamos aplicar un tope de usura
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

La diputada del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), María Inés Solís, no esconde su preocupación por las altas tasas de interés en ciertos préstamos y tarjetas de crédito. Pero es mayor su posicionamiento ideológico en contra de la regulación de precios por parte del Estado, incluido un límite a las tasas de interés o tasa de usura. También es más amplio su temor a la exclusión financiera que puedan sufrir ciudadanos con el tope a las tasas, al no tener ofertas legales de endeudamiento.

Esta tarde se realizará una importante sesión de la Comisión de Asuntos Hacendarios, en la cual los diputados tratan de llegar a un consenso sobre cómo se calcularía un eventual tope máximo para las tasas de interés. Representantes del Banco Central, la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) y el Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD) responderán las preguntas de los congresistas.

Antes de la audiencia, la diputada Solís conversó con El Observador sobre el proceso, del cual ha sido muy crítica y que tildó de “populista”, criticando al Partido Acción Ciudadana (PAC) y Liberación Nacional (PLN), cuyos representantes Welmer Ramos y David Gourzong respectivamente han sido los principales impulsores del proyecto de ley.

– ¿Si por usted fuera, no deberíamos aplicar un tope de usura?

A mí me parece que no deberíamos hacerlo, pero va a suceder, entonces quiero que sea de la mejor manera posible.

Costa Rica contempla como un delito la usura desde 1971, pero no estableció ningún límite. El artículo 243 del Código Penal estipula que:

…será reprimido con prisión de seis meses a dos años o con veinte a ochenta días multa, el que, aprovechado la necesidad, la ligereza o la inexperiencia de una persona, le hiciere dar o prometer cualquier ventaja pecuniaria evidentemente desproporcionada con su prestación, u otorgar garantías de carácter extorsivo. La misma pena es aplicable al que a sabiendas adquiriese o hiciere valer un crédito usurario.

OBSERVE MÁS: Con inusitada prisa, este martes se definiría fórmula para tope a intereses

Sin embargo Solís tiene claro que Costa Rica maneja tasas de interés muy altas que afectan al consumidor y la competitividad. Por eso apunta primer a los problemas estructurales de la economía nacional. Señaló al desempleo y el costo de vida como los principales responsables.

“Siempre el costarricense está necesitando de crédito para poder ajustar o tener alguna cosa. Y el segundo es el alto desempleo. La gente se queda sin trabajo pero tiene que seguir comiendo. La gente mientras consigue trabajo se apalanca con el crédito. (…) Entonces el riesgo automáticamente sube dentro de los créditos. El problema es más estructural”, mencionó.

Por eso se negó a definir un margen a las tasas, que implica establecer también un límite al margen de ganancia de las entidades financieras.

OBSERVE MÁS: Superintendencia confirma recálculo a topes para intereses: 45% para consumo y 61% para microcréditos

El mecanismo y la tasa promedio

Este martes, nuevamente se discute el posible tope a la usura. Estas fueron algunas de las consignas de los partidarios de establecer un límite. (Juan Pablo Arias/El Observador)

Así de enfática fue la sancarleña, quien reiteró que deben ser los entes técnicos – Sugef y Banco Central – los encargados de definir el tope. El último modelo presentado por la Superintendencia arroja un tope del 45% para los créditos de consumo y hasta un 61% en el caso de los microcréditos.

El Banco Central de Costa Rica (BCCR) había recomendado una entre 51% y 63% con una promediada de 57%.

Ramos, Gourzong y José María Villalta del Frente Amplio se decantan por un límite nominal cercano al 30%, basados en estudios de la Universidad Nacional (tasa máxima de 37%) y la Universidad de Costa Rica (35%).

La Comisión había avalado que el tope no podrá superar por 2,2 veces la tasa de interés activa promedio del sistema financiero nacional, es decir, una cifra cercana al 30% en este momento.

Pero María Inés Solís aseguró que usar ese promedio es erróneo, ya que se toman en cuenta todo el tipo de préstamos: de vivienda cuya tasa ronda el 12% de tasa; préstamos para becas; prendarios como para compra de carro, que a su vez tienen distintas tasas, sea con arrendamiento operativo o arrendamiento operativo en función financiera; tasa para préstamos de consumo; corporativos; o personales.

“Una tasa activa promedio siempre va a tender a la baja. En el momento en que usted recorta lo que está para arriba de ese promedio, el siguiente promedio va a ser mucho más bajo. Y así el siguiente año”, cuestionó.

 

OBSERVE MÁS: Presidente del Banco Central sobre tope a intereses: «Me parece peligroso que se haga por ley»

Por eso insistió que la discusión en torno al mecanismo y la estructura con que se calculará el límite aún debe profundizarse, pues es “medular”. Por eso considera que deben definirse distintas tasas límites.

Ante esto criticó a los defensores, por cuestionar el número que estableció la Sugef y el Banco Central en sus respectivos análisis.

OBSERVE MÁS: ¿Bajarán las cuotas de los préstamos si se aprueba un tope a los intereses?

Riesgo, ganancia y banca pública

En conversación previa con El Observador, el presidente del Banco Central, Rodrigo Cubero avaló un límite de 43% con colchón para gastos que sube a 45%. El jerarca apuntó a esa cifra, a pesar de que en sus cálculos de riesgo y estimaciones un banco ya toma en cuenta su margen de intermediación, es decir de ganancia.

Por su parte la Sugef desagregó – para establecer su propio límite – los siguientes componentes del cálculo:

  • costo financiero: 6,55%
  • liquidez: 0,8%
  • costos de administración: 5,6%
  • utilidad: 5,7%
  • riesgo: 25%

Ese elemento de riesgo es considerado como muy alto por parte de los opositores, que buscan una tasa de usura más baja.

Pero antes de tocar los espacios de ganancia de los bancos en general, María Inés Solís señaló que el Gobierno debe recortar los márgenes de utilidad de los bancos públicos, y con eso provocar una rebaja en sus propias tasas y de la banca privada.

“La banca pública es la que tiene que comenzar a bajar las tasas de interés”, reiteró. Aunque repitió que se opone a aplicar regulaciones a los precios y a la usura. “Ideológicamente me opongo a lo que sea regulación de precios y regulación de tasas”, concluyó.