Hermes Solano
“Bochornoso y desagradable”. Así calificó Erick Lacayo, director de la Escuela Nacional de Policía, el robo de varias armas que sufrieron en la sede de Pococí el sábado en horas de la madrugada.
Este hecho dejó muy golpeada la imagen del Ministerio de Seguridad.
Lacayo conversó este martes con El Observador, un día después de que el Organismo de Investigación Judicial detuviera a dos policías sospechosos de participar en el acto.
Ambos los detenidos eran los encargados de la seguridad interna del lugar en el momento de los hechos.
“Nuestro sistema se vio vulnerado por un tema de recurso humano, pareciera que por un tema de corrupción”, dijo Lacayo.
Los detenidos son funcionarios de la Academia. Según el director, se trata de personal con una antigüedad menor a los 10 años. En el momento del hurto estaban junto a 6 oficiales más.
¿Quién asume la responsabilidad?
El robo generó una gran cantidad de criterios de varios sectores, que incluso pidieron la renuncia del ministro de Seguridad, Michael Soto.
Sin embargo, por ahora, la situación se revisará en el departamento disciplinario, que es un ente adscrito al despacho del Ministro y el Viceministro.
“Hay un plan de seguridad, y un manual de procedimientos aprobado por el departamento de planificación, donde están establecidas las responsabilidades de cada uno. Estamos solicitando una revisión departamento disciplinario sobre el incumplimiento de esas responsabilidades”, señaló el Lacayo.
El director de la Escuela Nacional de Policía afirma que él como cabeza de la organización asume la responsabilidad y se compromete a buscar las mejoras necesarias para que no vuelva a ocurrir.
“No es nada agradable, lamentablemente por un acto de aparente corrupción de funcionarios nos vemos afectados todos. Esto no debe ocurrir y no se debe repetir”, dijo.
Los hechos
El pasado sábado, entre 4 y 5 hombres ingresaron con armas de fuego a la Academia y sustrajeron 16 pistolas, 10 subfusiles (arma de uso militar), chalecos antibalas, municiones y radios de comunicación.
Al día siguiente, en un allanamiento, el OIJ logró detener a una persona y dar con lo sustraído, que ya fue devuelto a la policía, según confirmó Lacayo.
