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Carlos Peña para El Observador
Siempre en mis presentaciones les hablo a los emprendedores de la importancia de crear riqueza. Naturalmente el objetivo de una actividad empresarial es la creación, acumulación y multiplicación del capital para luego traducirlo en riqueza.
Recordemos que el capitalismo es un método político que busca crear oportunidades de forma libre.
Esto para todos los que participan de dicho sistema con el fin de que, por medio del capital (herramientas, dinero, tierras, propiedad intelectual, otros) pueda ponerlo a trabajar, ganar un margen sobre los costos.
Y así adquirir más capital para, eventualmente, liquidarlo y guardar dicha liquidez como riqueza.
El problema en Costa Rica
El problema principal, creo yo, en Costa Rica es la falta de capacidad de escalabilidad de las empresas. Esto ya sea por un factor exógeno como es el entorno del mercado, pero también por falta de apetito al riesgo por parte de los empresarios.
En mis años de experiencia tratando con emprendedores de todo tipo reconozco que en Costa Rica preferimos la seguridad por encima de los resultados. También preferimos jugarla a la segura y recibir algo en vez de asumir riesgos y buscar el premio mayor.
Actualmente me encuentro frente a una disyuntiva y, quizás, ustedes me puedan ayudar a dilucidarla.
Conocen que tengo varios proyectos que desarrollo actualmente. Y hace unos días unos asesores financieros me contactaron y me ofrecieron comprarme uno de esos proyectos en el estado en el que está, que es una etapa incipiente.
El asunto aquí es que si me espero un año más las ganancias, de ser exitoso, pueden ser 5 veces más que lo ofrecido actualmente por estos asesores.
Y si asumo el riesgo…
Entonces el tema es este: si asumo el riesgo puedo ganar un buen retorno, pero significa tener que resolver varios problemas profundos que tiene el proyecto que estoy gestando. Y el primero es la falta de capital para la siguiente fase.
Actualmente me encuentro en un impasse con el proyecto. Esto porque estoy esperando una aprobación que puede ser de resultado inmediato, puede llegar tarde o puede no llegar del todo.
Entonces los asesores que se me acercaron me presentan la siguiente alternativa, que me pagan un quinto del retorno esperado, pero asumen todo el riesgo y me compran la participación.
Con el monto ofrecido no debo de ser mezquino. Resuelvo bastante del año 2020 y parte del 2021.
Me genera un canal de comunicación con personas que quizás en un futuro me puedan ayudar con otros proyectos, cumplo los objetivos iniciales del proyecto y me libera para iniciar otros emprendimientos.
Pero si tomara la decisión de dejar el proyecto estaría dejando pasar una oportunidad de alta rentabilidad como pocas veces he visto.
Esto a cambio debo de asumir un riesgo bastante grande que puedo manejar, pero a la vez tampoco he tenido que resolver en el pasado, por lo que debo admitir da un poco de miedo.
Entonces, aquí entran ustedes, los leo con sus comentarios y consejos sobre qué debo de hacer: ¿tomo el riesgo y busco la rentabilidad o aplico el bien conocido “mejor pájaro en mano”?
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