Destacado

Donald Trump, un presidente irreverente en apuros

Fiel a su irreverente estilo, el presidente estadounidense Donald Trump intenta sortear las incisivas críticas de sus detractores en lo…

Por Juan Pablo Arias

Tiempo de Lectura: 3 minutos
Donald Trump, un presidente irreverente en apuros
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

Fiel a su irreverente estilo, el presidente estadounidense Donald Trump intenta sortear las incisivas críticas de sus detractores en lo que podría ser el momento más polémico desde que llegó a la Casa Blanca en enero de 2017.

El mandatario enfrenta una investigación solicitada por el Partido Demócrata para destituirlo por medio de un “impeachment”, la figura que se utiliza en ese país.

Trump, de 73 años y con amplia trayectoria empresarial, se ha caracterizado por un estilo alejado de lo “políticamente correcto”. Y a lo largo de su paso por la Presidencia ha dejado claro que sus decisiones son, prácticamente, incuestionables.

Quienes trabajan con él y lo adversan terminan abandonando el barco. Quienes se revelan opositores reciben de él ácidos comentarios nocturnos vía Twitter. 

En la política internacional, su movida más arriesgada había sido la de buscar un acercamiento con el líder norcoreano Kim Jong Un; considerado por muchos un acérrimo enemigo de la principal economía del mundo.

Pero el paso en falso resultó ser una conversación telefónica con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, a quien le pidió investigar a su rival político Joe Biden.

Según la transcripción de la llamada del 25 de julio, Trump le pidió a Zelenski “mirar” señalamientos de supuesta corrupción contra uno de los hijos de Biden, principal candidato demócrata a las elecciones de 2020.

“Se habla mucho del hijo de Biden, que Biden detuvo la investigación y muchas personas quieren saber sobre eso”, dijo Trump a Zelenski. “Biden se jactaba de haber detenido la investigación así que si puedes mirar eso”, añadió.

Douglas Campos para El Observador

Los demócratas reaccionaron a estas palabras y aseguraron que la transcripción “refleja inequívocamente un abuso impactante y condenatorio de la función presidencial para beneficio político personal”.

“Así es como habla un jefe de la mafia”, dijo el presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam Schiff, sobre Trump.

Así las cosas, 400 días antes de las elecciones presidenciales, los demócratas lanzaron la primera etapa hacia un juicio político. Un procedimiento inusual con pocas chances de terminar en una destitución, pero que arroja una sombra sobre la campaña de reelección del mandatario.

No es el primero

Tres presidentes estadounidenses ya pasaron por un proceso similar: Andrew Johnson en 1868, tras la Guerra Civil estadounidense; Richard Nixon, por el caso Watergate y Bill Clinton, por el escándalo sexual relacionado con la exbecaria Monica Lewinski.

De los tres, ninguno fue destituido. Para Johnson no se lograron los votos necesarios, Clinton fue absuelto… y Nixon renunció antes de poder ser destituido.

Un problema nunca viene solo

La transcripción de la llamada con Ucrania, no es el único dolor de Cabeza para Trump. El diario Washington Post reveló el viernes por la noche que el presidente de Estados Unidos le dijo al ministro de Relaciones Exteriores y al embajador de Rusia que la interferencia de Moscú en las elecciones presidenciales de 2016 no le preocupaba.

Las declaraciones fueron efectuadas durante una reunión en mayo de 2017 en la Casa Blanca, en Washington, durante la cual también les reveló información confidencial sobre el grupo yihadista Estado Islámico.

Durante la conversación, Trump le dijo a Serguéi Lavrov y al embajador que la intromisión rusa en las elecciones no le molestaba porque Estados Unidos estaba “haciendo lo mismo en otros países”, según el periódico, que citó, bajo condición de anonimato, a tres ex altos funcionarios.

El Presidente Trump, por su parte, advirtió el sábado que Estados Unidos “está en juego como nunca antes”. 

En un mensaje de video publicado en Twitter, el mandatario subrayó que los legisladores demócratas lo acusan sin fundamento e insistió que es objeto de una “cacería de brujas”.

Según una encuesta publicada este domingo por CBS, el 55% de los estadounidenses (y 90% de los demócratas) aprobaría un juicio político contra Trump.

Con información de AFP y CBS.

Temas: