Esteban Mata
El diputado jefe de fracción de Restauración Nacional, Eduardo Cruickshank, alzó la voz y utilizando parte de su lenguaje de pastor evangélico, afirmó: “Yo declaro que el Teatro Nacional no se va a quemar”.
La aseveración de Cruickshank se dio en el plenario legislativo, como parte de la discusión sobre el proyecto de ley con el que se pretende aprobar un crédito por $31 millones para implementar una serie de restauraciones, construcciones y sistemas contra incendios.
“Los cristianos decimos; la vida y la muerte están en el poder de la lengua, al final eso mismo es lo que dijo el diputado Villalta, pero con otras palabras”, afirmó el legislador, en referencia a manifestaciones del diputado del Frente Amplio, José María Villalta sobre el tema.
De seguido, Cruickshank realizó el reclamo que sigue latente en la provincia de Limón, en vista de que el gobierno de Luis Guillermo Solís dejó sin cumplir la promesa de levantar de nuevo el emblemático edificio “Black Star Line”, que se destruyó por un incendio en abril del 2016.
“Entonces como el poder de la vida y la muerte está en la lengua yo declaro que el teatro no se va a quemar, y no se va a quemar, como sí se quemó el teatro nacional de los limonenses, el Black Star Line, el Liberty Hall, el teatro nacional de los limonenses, se quemó hace seis años y el expresidente Luis Guillermo Solís dijo: ‘Yo como tengo sangre afrodescendiente en mis venas, voy a dar los fondos para que se construya en los próximos tres años’. Llevamos seis, y no hemos visto ni los fondos ni la construcción”, recalcó Cruickshank.
El proyecto para aprobar el crédito por $31 millones para el Teatro Nacional recibió primer debate la tarde de ayer martes con el voto de 33 diputados, sin embargo, para que sea aprobado de manera definitiva, necesita el visto bueno de 38 legisladores.
Esteban Mata
