AFP
El huracán Ian, de categoría 3 sobre 5 en la escala Saffir-Simpson, tocó tierra en la madrugada del martes en La Coloma, en la provincia de Pinar del Río en Cuba.
Horas después salió al golfo de México en dirección norte, rumbo a Florida (Estados Unidos).
El Instituto Meteorológico (Insmet) de Cuba indicó que la salida al mar de Ian se produjo a las 11:40 hora local (9:40 a.m. en Costa Rica).
Esto tras debilitarse parcialmente, aunque es posible que recobre fuerza y alcance categoría 4 en las próximas horas.
Los efectos de Ian seguirán sintiéndose durante horas en Cuba, con lluvias intensas y vientos fuertes durante toda la jornada y perturbaciones que persistirán hasta este miércoles.
Las autoridades de la isla avanzaron que los daños materiales son “considerables”, si bien de momento no se han reportado daños personales.
En las provincias occidentales de Pinar del Río y Mayabeque se produjeron daños en viviendas, edificios públicos y fábricas.
También en campos, casas de tabaco y carreteras, debido a inundaciones -tanto por las precipitaciones como por la entrada del mar en áreas costeras- y a la caída de árboles y postes eléctricos derribados por los fuertes vientos.
Además, cientos de miles de residentes en el occidente del país están sin electricidad.
Los cubanos debieron hacer filas este lunes en busca de alimentos para abastecerse antes de la llegada de Ian a la isla. REUTERS
Las autoridades ordenaron la evacuación a refugios a decenas de miles de personas.
La Defensa Civil Nacional decretó la “alarma ciclónica” para todo el tercio occidental del país y dejó en fase de “alerta” a otras tres provincias. Colegios y otros servicios públicos han quedado suspendidos, como la inmensa mayoría del transporte terrestre y marítimo.
Pescadores cubanos guardaban sus embarcaciones ante la proximidad de Ian el lunes por la noche. REUTERS
El Caribe todavía se está recuperando de los efectos del huracán Fiona, que azotó la región la semana pasada.
Camino hacia Florida
En cuanto Ian se fortaleció el lunes, las autoridades del estado de Florida (EE.UU.) instaron a los residentes a “hacer sus preparativos” para enfrentar la tormenta.
Se pronostica que, tras su paso por Cuba, Ian siga su ruta por el noroeste del Caribe y llegue el miércoles a la costa oeste de Florida, donde se ubica Tampa, ciudad que no ha enfrentado un gran huracán en un siglo.
La trayectoria exacta del huracán es incierta, pero el gobernador Ron DeSantis advirtió sobre “amplios impactos en todo el estado”.
A lo largo de la costa de la Bahía de Tampa, los estantes de las tiendas de comestibles se vaciaron rápidamente y hubo largas colas en las gasolineras.
“Nunca es demasiado pronto para prepararse”, tuiteó la alcaldesa de Tampa, Jane Castor, el domingo.
Funcionarios locales de su municipio y de otros como Miami y Fort Lauderdale están distribuyendo sacos de arena gratuitos para ayudar a los residentes a proteger sus hogares de las inundaciones.
Meteorólogos dijeron que es posible que se produzcan inundaciones repentinas para el martes en la península de Florida y los Cayos.
Residentes de Florida llenando sacos de arena antes de la llegada del huracán. REUTERS
El gobernador declaró el estado de emergencia para todo Florida durante el fin de semana y activó a 5.000 soldados de la Guardia Nacional para ayudar con los esfuerzos de socorro.
DeSantis dijo que Ian representa un riesgo de “marejadas ciclónicas peligrosas, fuertes lluvias, inundaciones repentinas, vientos fuertes, mares peligrosos y actividad aislada de tornados”.
“Este es un huracán realmente grande en este momento”, dijo en conferencia de prensa este lunes, instando a los residentes a “mantener la calma”, pero “hacer lo que sea necesario para estar preparados”.
La Casa Blanca también brindará su apoyo en caso de desastre.
