Hermes Solano
Las campañas de José María Figueres del PLN y Fabricio Alvarado de Nueva República iniciaron el período electoral con la consigna de que trabajarán para ganar en primera ronda las elecciones nacionales, el 6 de febrero del 2022.
Lo hacen en un panorama donde se vislumbran más de 25 candidatos presidenciales y con una realidad política difícil.
El padrón electoral oficial será dado a conocer por el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) en las próximas semanas.
Sin embargo, al 30 de setiembre, cinco días antes de cerrar el padrón para los comicios del 2022, el número de votantes era de 3.542.498. Por eso el 40% requerido para ganar es de poco más de 1,4 millones de votos.
¿Posible ganar en primera ronda?
Para el analista político Constantino Urcuyo es irreal pensar en una posible victoria en primera ronda.
“La primera vuelta es para ir eliminando partidos y candidatos. Ya viene la segunda ronda y ahí se simplifica a las fuerzas más grandes e incentiva la formación de coaliciones de apoyo”, dijo el politólogo a El Observador.
En el PLN consideran que los más de 430.000 personas que votaron en la convención interna es la base que les permitirá ir sumando adeptos en busca de la meta del 40%.
En el caso de Nueva República confían en los poco más de 500.000 electores que votaron por Alvarado hace cuatro años como voto duro, con la esperanza de tener por lo menos 800.000 votos asegurados al llegar enero.
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PLN
Lectura política
Urcuyo se basa en las encuestas que se han publicado hasta ahora, incluida la de Demoscopía para El Observador, para ser claro en que es muy difícil que algún candidato llegue al 40%.
En el estudio publicado por este medio a inicios de octubre, José María Figueres recibió el apoyo del 26,8%. Por su parte, Lineth Saborío de la Unidad Social Cristiana tuvo el 7,5% y Fabricio Alvarado de Nueva República con 7,1%.
Welmer Ramos, cosecha 6,7% de apoyos para que el PAC. Y empatados con 4,4% aparecieron Rolando Araya de Costa Rica Justa y José María Villalta del Frente Amplio.
“A menos de que ocurran acontecimientos imprevisibles no va a llegar al 40% (Figueres) y a los otros les va a costar llegar al 17% y 18%”, analizó Urcuyo.
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Últimas cinco elecciones
De las últimas cinco elecciones nacionales, solo en dos se resolvió en la primera ronda. Estos fueron los casos en el 2006 y 2010 con los triunfos de Óscar Arias y Laura Chinchilla, respectivamente.
Arias alcanzó un 40,92% para lograr la victoria, mientras que Chinchilla lo hizo con el 46,91% al obtener 896.516 votos.
En 2002, 2014 y 2018 la Presidencia de la República se definió en segunda ronda en abril.
La primera vez en la historia del país que sucedió fue en la campaña de Abel Pacheco contra Rolando Araya. El socialcristiano alcanzó un 38,58% en febrero de 2002 y en abril logró un 57,95% para ganar.
Hace ocho años, Luis Guillermo Solís del PAC y Johnny Araya del PLN lograron la mayoría de los votos. Solís tuvo el 30,64% y Araya el 29,71%.
Ya en segunda ronda, quien llegó a Zapote lo hizo gracias al 77,76% de apoyo en las urnas. Esto al sacar provecho de la previa renuncia del liberacionista.
Por último, en 2018, Fabricio Alvarado de Restauración Nacional dio la sorpresa al ser el más votado con el 24,99% en primera ronda, mientras que Carlos Alvarado del PAC obtuvo el 21,63% de los votos.
En abril de ese año el candidato de Acción Ciudadana alcanzó el 60,59% para ganar.
El TSE ya tiene presupuestados ¢7.463 millones para las elecciones nacionales; ¢4.847 millones en febrero y para la segunda vuelta un total de ¢2.616 millones.
