Paulo Villalobos
La Policía Profesional de Migración (PPM) encontró este miércoles a 10 migrantes con estatus irregular que permanecían en un caserío en Los Chiles de Alajuela, donde una organización de “coyotes” ocultaba a extranjeros que luego trasladaban a Nicaragua.
Dichas personas, quienes son objeto del delito de tráfico ilícito de migrantes, ahora reciben asistencia. Dos de ellas son menores edad, mientras que uno es adulto mayor.
Detención de “coyotes” realizada este miércoles en Los Chiles de Alajuela. (Cortesía | Dirección General de Migración y Extranjería)
El hallazgo de los migrantes se dio durante un conjunto de diligencias realizadas esta mañana por la Unidad de Gestión de Investigaciones, Análisis e Inteligencia del cuerpo policial, bajo la dirección funcional de la Fiscalía de Los Chiles.
Allí además se logró desintegrar una banda de “coyotes” conformada por:
- Galeano Díaz, costarricense
- Zamora Miranda, costarricense
- Zamora Miranda, costarricense
- Miranda Cálix, costarricense
- Jarquín Mena, costarricense
- González Castro, costarricense
- García Acuña, nicaragüense
- Lizano Téllez, nicaragüense
Todos ahora quedaron a las órdenes del Ministerio Público, de acuerdo con el subdirector de la Policía de Migración, Alonso Soto.
El órgano acusador del Estado por tanto valorará la condición legal de los detenidos y la posible solicitud de medidas cautelares.
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La investigación contra la agrupación ilícita inició en octubre pasado, cuando se comprobó que las personas extranjeras ingresaban y permanecían ilegalmente en territorio nacional.
En apariencia, luego se trasladaban de San José hasta el cantón alajuelense por autobús, arribando normalmente por las noches.
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Ya en la terminal, eran captados por los colaboradores de la organización criminal para facilitar su traslado hasta Nicaragua.
En el trayecto, se sospecha que los migrantes irregulares eran alojados y ocultados en viviendas de Galeano Jiménez, para evitar que fueran detectados.
Durante la madrugada, se les transportaba hasta el sector conocido como “El Cevichito”, para que cruzaran la frontera sin cumplir con los controles migratorios establecidos.
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Para dichas actividades, el grupo cobraba entre ¢10.000 y ¢15.000, al aprovecharse de la condición migratoria irregular y el temor de ser encontrados en operativos policiales.
Durante el 2019, la Gestión de Investigaciones de la Policía Profesional de Migración ejecutó cinco casos de investigación en Los Chiles, donde detuvo a seis nicaragüenses por el presunto delito de tráfico ilícito de migrantes.
Paulo Villalobos
