Tomás Gómez
El 98% de las energías que utiliza el país son renovables, sin embargo, ese avance no fue planificado ni existe un modelo de tarifas que lo regule.
Así lo determinó la Contraloría General de la República (CGR) en una auditoría dada a conocer la semana pasada.
“Las modificaciones en el ordenamiento jurídico efectuadas en diferentes momentos históricos han causado desmejoras en el funcionamiento de la institucionalidad del sector eléctrico”, planteó el ente contralor en el informe.
“Estas modificaciones incorporaron nuevas funciones y actores, que participan junto al ICE en la generación eléctrica. No obstante faltó prever elementos que permitieran su acople al modelo eléctrico, para que este funcione ordenadamente con relaciones eficientes entre actores y procesos”, continúa el informe.
Metas cuestionadas
Según la Contraloría la meta de llegar al 2030 utilizando sólo energías renovables va cuesta arriba.
El objetivo no tiene un estudio técnico que lo respalde.
Además, los hallazgos indican que el Plan Nacional de Energía 2015-2030, actualmente en vigencia, no incluye indicadores para medir sus resultados.
La misma situación se repite en cuanto al Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 7, un compromiso del país ante las Naciones Unidas para incrementar el uso de energías renovables que no tiene un sistema para medirse.
El eterno debate de las tarifas
Las discusiones sobre el costo de la energía llegan también al área renovable.
La revisión arrojó que no hay un modelo económico para balancear la generación y la demanda.
Además, aunque cada vez más hogares generan energía las tarifas por el uso de la red les siguen impactando.
Las recomendaciones están ahora en manos del ICE, la Aresep y los Ministerios de Planificación y Ambiente para implementar los cambios.
