Tomás Gómez
Tres semanas después de iniciar una toma de las instalaciones de la Universidad de Costa Rica (UCR) en Puntarenas, los estudiantes aceptaron levantar su protesta y reabrir la institución.
El vicerrector de Administración de la UCR, Carlos Araya, el director de la sede, Mario Solera, y el presidente del movimiento estudiantil local, Didier Chavarría, llegaron a un acuerdo este lunes.
Luego de varios intentos de negociación, las partes pactaron un documento de 11 puntos entre los que destacan:
- Incremento presupuestario del 6,85% para la Sede
- Asignación de 17 tiempos completos para el nombramiento de profesores
- Finalizar, en el plazo de un año, la ampliación de las instalaciones en Esparza y su soda
- Construcción de un auditorio en Esparza, la cual deberá iniciar en el segundo semestre del 2020
La imposición de sanciones dependerán de una inspección que realizarán las autoridades universitarias a las instalaciones y sus equipos.
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Semanas de conflicto
La Sede del Pacífico fue la primera en ser tomada por estudiantes, en medio de las protestas por el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES).
El movimiento inició el 16 de octubre, cuando las autoridades de la UCR reclamaron el redireccionamiento de ¢70.000 millones del FEES a gastos de capital en el proyecto de Presupuesto 2020 del Ministerio de Hacienda. Además los jóvenes alzaron su voz por las desigualdades de los recintos de la UCR respecto a su sede central.
Aunque el Consejo Nacional de Rectores (Conare) pactó con el Gobierno mantener el monto de ¢35.000 millones según su propia categorización, los estudiantes mantuvieron su movimiento.
Además de la UCR en Puntarenas fueron tomadas la Facultad de Ciencias Sociales – ya devuelta – y los edificios de Educación y San Ramón – aún bajo poder de los estudiantes -.
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