Paula Ruiz
Los estudios de ADN realizados a los restos humanos hallados en una refrigeradora dentro de una casa en San Pablo de Heredia y en un lote baldío en Bajo Los Molinos son de la joven Nadia Peraza.
“Se confirma por parte de la Sección de Patología Forense y Sección de Bioquímica que los restos hallados en un refrigerador en San Pablo de Heredia, corresponden a los de una femenina de apellido Peraza de 21 años”, informó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Estos restos se ubicaron el viernes 17 de mayo, tras investigaciones de agentes del OIJ de Heredia por la desaparición de la joven.
El lunes 20, las autoridades le comunicaron a la familia de la víctima que preliminarmente eran los restos de Peraza por unos tatuajes que ella tenía. Eso sí, la policía judicial estaba a la espera de estos resultados para tener una confirmación a nivel científico.
Para Joseph Rivera, abogado de la familia de Nadia, esto es importante porque ya no hay manera de que el sospechoso busque “zafarse” de este delito.
Rivera destacó que esta prueba científica es de vital importancia dado que son más de 20 partes del cuerpo que se ubicaron en los lugares donde estaba o estuvo el sospechoso, compañero sentimental de la víctima.
“Sí es importante […] eso amarra más la tesis científica cuando llegue el perito forense a declarar como perito forense de todo lo que encontraron y el grado con el que Buzano Paisano la mató”, declaró el defensor de la familia de Nadia a El Observador.
Se sospecha que Buzano Paisano la habría matado y descuartizado en la casa donde convivían, ubicada en Bajo Los Molinos.
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Nadia Peraza había sido vista por última vez en febrero. (Cortesía/OIJ).
Honras fúnebres
De acuerdo con el abogado de la familia, este fin de semana se reunirá con la madre de Nadia, Marilyn Espinoza, con el fin de coordinar lo correspondiente a las honras fúnebres de la joven de 21 años.
Así las cosas, tendrán que definir si será cremada o enterrada, además de la iglesia donde se llevarían los actos religiosos. Sería hasta la próxima semana cuando los familiares tengan definido estos datos.
Nadia había sido vista por última vez el 20 de febrero, pero su desaparición se reportó hasta el 1 de marzo por parte de un tío.
Debido a ello, agentes judiciales iniciaron con la investigación y lograron detectar que el sospechoso se trasladó a vivir a San Pablo de Heredia el 6 de abril.
Cuando fueron a ese lugar, visualizaron una refrigeradora que procedieron a abrir, sin embargo, de inmediato, se generó un mal olor y recurrieron a solicitar un allanamiento para confirmar si se trataba de restos de la joven.
En el expediente judicial, también se detalla que Buzano Paisano estaba viviendo en esta casa porque era amigo del hijo del dueño del inmueble.
Dicho amigo, le pidió en un par de ocasiones limpiar la refrigeradora debido al mal olor que se generaba. Allí, se detalla que Buzano Paisano la lavó, pero aún así, el olor se volvía a generar a los días.
El sospechoso se encuentra descontando un año de prisión preventiva.
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