Paula Ruiz
Los seis diputados afines a Nueva República planean eliminar la restricción vehicular sanitaria que se impuso desde abril de 2020 por la pandemia.
La iniciativa que al cierre de esta nota no tenía asignado un número de expediente, pretende derogar y reformar artículos de la Ley de Tránsito que dieron vida a esta restricción.
Entre los puntos que buscan derogar, es la sanción de ¢110.387 así como el destino específico en el que se utilizarían estos recursos por violar la restricción sanitaria.
De acuerdo con la Ley, el dinero recolectado por las multas, debe ser destinado a financiar ayudas a personas afectadas económicamente por la emergencia nacional provocada por el covid-19.
“Es tiempo de que todos podamos movilizarnos por Costa Rica para trabajar, vender, comprar, emprender y para poder vivir. Ya el país debe volver a su estado original”, dijo Jonathan Prendas, diputado independiente.
Dentro de las justificaciones del grupo de congresistas para aprobar esta medida están el freno a la actividad económica que genera la restricción vehicular.
Además, desde hace siete semanas epidemiológicas se reporta una baja constante en casos positivos con el virus.
De hecho, este 30 de noviembre se registraron 48 nuevos casos, hay 228 pacientes internados, 83 de ellos en cuidados intensivos (UCI).
También argumentan que ya hay un 62% de la población con dos dosis tras la aplicación de 7.137.983 dosis.
“Esta medida ha provocado largas filas en las paradas de autobús, un evidente colapso en el transporte público y la afectación de la calidad de vida de las personas usuarias, quienes tardan más tiempo para llegar a sus destinos debido a que el sistema de transporte público no da abasto ya que permite una cantidad muy limitada de pasajeros”, indicó.
Finalmente, el cierre del Ceaco que estuvo abierto para atender exclusivamente a pacientes con covid-19.
28.000 empleos
En julio anterior, un grupo de cámaras empresariales presentó un análisis donde se estimó que de eliminar por completo la restricción, se podrían generar 28.000 empleos.
Por ejemplo, sin restricción sanitaria los bares y restaurantes podrían contratar entre 6 y 48 personas según el tamaño de la empresa.
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O bien, en cines y entretenimiento, la contratación llegaría hasta 18 personas como máximo por cada local comercial.
En ese panorama, el aumento en ventas totales sería de ¢84.000 millones mensuales lo cual permitiría una recaudación de ¢18.500 mensuales al fisco.
Actualmente, se mantiene la restricción vehicular nocturna que inicia a las 11 p.m. y se extiende hasta las 5 a.m durante todos los días.
Todavía se mantiene la restricción vehicular nocturna. (Archivo/El Observador)
