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Gustavo Matosas, el aburrido hombre que nos desnudó

Cuando el miércoles pasado Gustavo Matosas renunció a dirigir la Selección Nacional de fútbol masculino, nos desnudó a todos, como…

Por Harold Leandro

Tiempo de Lectura: 4 minutos
Gustavo Matosas, el aburrido hombre que nos desnudó
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Cuando el miércoles pasado Gustavo Matosas renunció a dirigir la Selección Nacional de fútbol masculino, nos desnudó a todos, como sociedad, como dirigentes deportivos y hasta como medios de comunicación.

Gustavo Cristian Matosas Paidón – argentino nacionalizado uruguayo de 52 años (25 de mayo de 1967 en Buenos Aires) y de 1.85 metros – dijo al mediodía en televisión – cuando toda Costa Rica lo miraba – que dejaba la Tricolor porque es “aburrido dirigir una selección”.

La frase desató la furia de tirios y troyanos. Fue publicada en todos los medios, comentada en radio, televisión, hogares, cantinas, buses, en fin, en todas partes.

Y no solo en Costa Rica, pues allende fronteras también causó revuelo. Desde Tite (técnico de Brasil), el maestro Óscar Washington Tabárez (Uruguay) y hasta Jorge Luis Pinto Afanador (Millonarios de Colombia) se pronunciaron sobre ella.

En los medios de comunicación de México la publicaron y la comentaron hasta la saciedad.

La figura

Hijo de Roberto Matosas, un ídolo de River Plate en la década de 1960, Gustavo no es ningún arribista en el planeta fútbol y como jugador dispone de tres coronas. En Peñarol ganó dos de la Primera División de Uruguay (1985 y 1986) y con Atlético Paranaense la Segunda División de Brasil en 1995.

Como entrenador ha ganado seis tútulos, cinco nacionales y uno de la Concacaf.

El primero lo conquistó en Uruguay con el Danubio en el 2007. Luego se trasladó a México donde hizo carrera con el León, pues salió campeón de Segunda División (2012) y de Primera (2012, 2013 y 2014). El cetro internacional lo logró con el América en la Liga de Campeones de la Concacaf del 2015, en Canadá.

Tras salir de México, donde también dirigió a Querétaro, América y Atlas, pasó a Arabia Saudita con el Al-Hilal (2016), Paraguay con el Cerro Porteño (2017), Argentina con Estudiantes de La Plata (2017), para recalar luego en la Tricolor.

Números en rojo

La apuesta de Rodolfo Villalobos por Gustavo Matosas inició en el 2018. Pero realmente fue en una venta de humo que se disipó en menos de un año. (Fedefútbol)

Al frente de la Selección Nacional, a Matosas los números no lo avalan: en los 9 meses que estuvo con la Tricolor dirigió 8 juegos, en los que cosechó 3 victorias, un empate y 4 derrotas para un escuálido 41.67% de rendimiento.

Sus únicas victorias fueron ante selecciones de escasa monta: (Jamaica, 1-0, 23/03/2019), Nicaragua (4-0, 16/06/2019) y Bermuda (2-1, 20/06/2019).

La peor vergüenza que le deparó Matosas a la Tricolor fue caer 2-1 ante la débil Haití el 24 junio del 2019 en el Red Bull Arena de Harrison, Estados Unidos, en juego por el grupo B de la Copa de Oro de la Concacaf.

Significado de la frase

La frase de Matosas nos desnudó, pues una vez más se comprobó que a los ticos nos emboban cuando nos hablan “en bonito” y ese acento rioplatense es el ideal en el ámbito futbolero.

Eso fue lo que utlizó muy bien Matosas. Se presentó – y todos lo creímos – como un ganador, que pertenecía la élite del fútbol, que era un “entendido”.

Todo con ese acento que cautivó, que embelezó, que creímos sin chistar. Pero pocos se percataron de que don Gustavo Cristian no dura, en promedio, más de 9 meses en los equipos que dirige, justo el tiempo que estuvo en el banquillo de la Tricolor.

Estos son los equipos que ha dirigido Gustavo Matosas. Pueden apreciarse los fechas en que estuvo, los resultados y el rendimiento.

Por eso, cuando dijo que es “aburrido dirigir una selección” se nos cayó de golpe del pedestal que algunos lo habíamos puesto, apadrinado por una dirigencia que le dio permiso de dirigir ante Uruguay y que solo la sensatez de los seleccionados pudo impedir y en su lugar lo hizo Douglas Sequeira.

También puso en mal a una prensa costarricense que es más cerca a complacer que a cuestionar. Durante 10 meses, pocas interrogantes se colocaron a los métodos de trabajo de Matosas; el juego plasmado en la cancha; y el nulo salto cualitativo de la Selección en su fugaz era.

Estas son las consecuencias de una frase dicha por una persona que muchos ticos habían instalado en el panteón de los líderes idóneos para el fútbol criollo y que hoy cayó en total descrédito.

Matosas fue un completo “bluff”, un farol en español, la jugada usada en el póker para pretender que se tiene una mano impresionante y realmente no hay nada detrás.