Aunque la Sala IV ordenó que los detenidos no pasen más de 72 horas en las celdas judiciales el problema sigue sin solucionarse y más bien se agrava.
Los lentos protocolos del Ministerio de Justicia para admitir reos se traducen en hacinamiento de los espacios de encierro temporales con los riesgos que ello implica.
Hasta este lunes al menos 75 detenidos sumaban más de dos semanas en esas celdas.
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Ante este escenario la Corte Plena y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) denunciaron este martes las malas condiciones que genera el hacinamiento.
Según expusieron, además, los retrasos ya han generado 47 condenas contra el Estado por las detenciones en las celdas y un retraso en los juicios.
Detenidos entre COVID y otros problemas
El director del OIJ, Walter Espinoza, detalló que el hacinamiento genera riesgos por COVID-19 pero también violencia y falta de condiciones mínimas de dignidad.
La vicepresidenta de la Corte, Patricia Solano, agregó que incluso hay casos positivos de la enfermedad.
“Tenemos un caso que pasó toda la cuarentena ahí, 21 días, incluso se recuperó en celdas judiciales”, dijo la magistrada.
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Solano explicó también que al estar las celdas llenas no pueden trasladarse reos desde las cárceles a sus propios juicios, lo que está frenando la actividad penal.
Al concluir, la vicepresidenta indicó que reconocen el hacinamiento de las cárceles y los esfuerzos por atenderlo, pero que eso no es excusa para el problema generado.
Celdas para un rato
Las celdas del OIJ no tienen las condiciones de una cárcel para el encierro prolongado.
Estos espacios sirven para albergar detenidos mientras se deja en firme su libertad o traslado a una cárcel o bien durante horas de juicio.
Baños, comedores o patios son parte de las carencias de las celdas.
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Ya a mediados de agosto, la Sala IV había ordenado limitar su uso pues prolongar la estancia en ellas es violatorio de los derechos humanos fundamentales.
La situación se torna más compleja pues las celdas deben asegurar también la separación entre hombres, mujeres y personas trans, así como entre adultos y menores.
El director del OIJ advirtió también que se podría llegar al punto de no poder recibir detenidos en acciones policiales por el hacinamiento.