Portada

Historias del Bicentenario: Una segunda República | 1921-1971

Para la segunda década del siglo pasado comienzan a mostrarse las primeras fisuras del modelo agroexportador, un sistema que dividía…

Por Harold Leandro

Tiempo de Lectura: 7 minutos
Historias del Bicentenario: Una segunda República | 1921-1971
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

Para la segunda década del siglo pasado comienzan a mostrarse las primeras fisuras del modelo agroexportador, un sistema que dividía a los países en dos clases: Los pobres productores de materias primas (en el caso de Costa Rica: café, banano y azúcar) y las potencias que para sostener su poder industrial, necesitaban esas materias primas.

La principal contradicción radicaba en que las naciones latinoamericanas quedaban en total dependencia del mercado internacional, el cual imponía el precio de compra tanto de sus productos (los manufacturados), como el de los que consumían.

Esta situación se agigantaba en los tiempos de crisis. Y fueron graves tres coyunturas: La Primera Guerra Mundial (del 28 de julio de 1914 al 11 de noviembre de 1918, 4 años, 3 meses y 14 días), la Gran Depresión (empezó con la caída de la Bolsa de Nueva York el 29 de octubre de 1929 y su efecto se mantuvo por muchos años) y la Segunda Guerra Mundial (del 1 de setiembre de 1939 al 2 de setiembre de 1945, 6 años y 1 día).

En estos tres escenarios, la repercusión para nuestra economía fue la misma: crisis, porque las potencias (Estados Unidos e Inglaterra, principalmente) enfocaron su producción en términos de ganar la conflagración o superar el trance.

Voces disonantes

Es por ello que pronto surgirán voces disonantes que cuestionaban el status quo. El primero fue el Partido Reformista, un grupo político dirigido por el general Jorge Volio Jiménez, un exponente de la oligarquía cafetalera. Para muestra un botón: Era primo hermano de Ricardo Jiménez Oreamuno, del que fue su Segundo Designado (Vicepresidente) en la segunda administración (8 de mayo de 1924-8 de mayo de 1928).

Jorge Volio fue fundador y máximo líder del Partido Reformista. Foto tomada de asamblea.go.cr.

Ferviente liberal, Volio estudió filosofía y se recibió de sacerdote en Europa. Una vez de regreso en Costa Rica se incorporó a las luchas de obreros y campesinos, los cuales expresaban su descontento con las condiciones laborales y sociales.

Este entusiasmo lo llevó a oponerse a la dictadura de Federico Tinoco (entre el 27 de enero de 1917 el 13 de agosto de 1919) así como a luchar al lado de César Augusto Sandino en contra de la ocupación de Estados Unidos en Nicaragua (donde alcanzó el grado de general).

En 1923 fundó el Partido Reformista, el cual tuvo buena acogida electoral y cuyo eje fundamental era realizar cambios graduales a fin de mejorar el sistema imperante.

No obstante, perdió fuerza argumentativa al apoyar a su primo Ricardo Jiménez y viajar a Europa por padecer problemas de salud. El decaimiento de este movimiento apuntaló la formación de otra voz disidente: el Partido Comunista (16 de junio de 1931), pues mucha de la base social de apoyo de Manuel Mora y su partido provenía del reformismo.

Mientras del Partido Reformista -como su nombre lo indica- buscaba hacerle reformas al modelo agroexportador para hacerlo más junto, el Comunista era más radical y planteaba un cambio total en el sistema capitalista.

Un cambio radical

Impulsado por la experiencia soviética  y alimentado por el descontento en amplios sectores obreros y campesinos ante las consecuencias de la Gran Depresión, los comunistas comienzan a tener influencia en la vida política y en la década de los 40 asumen un papel protagónico la formar parte de la alianza con el gobierno de Rafael Ángel Calderón Guardia y la Iglesia Católica (dirigida por monseñor Víctor Manuel Sanabria) para aprobar las Garantías Sociales.

Rafael Ángel Calderón Guardia, junto con la Iglesia Católica y el Partido Comunista, impulsó la aprobación de las Garantías Sociales. Foto “Colección histórica del Museo Nacional de Costa Rica”.

Acuerpados por la alianza entre Estados Unidos y la Unión Soviética para luchar contra el nazismo y el fascismo en Europa, estas tres fuerzas dispares acordaron impulsar una reforma social, la cual incluía la creación de la Caja Costarricense del Seguro Social, la aprobación de un Código de Trabajo y la introducción de un capítulo de Garantías Sociales en la Constitución.

Es así como en la administración de Calderón Guardia se vira a la izquierda, se alía con los comunistas y, junto con la Iglesia Católica, pone en funcionamiento una legislación de avanzada que, por su parte, traerá una fuerte oposición de los sectores más conservadores de la oligarquía cafetalera.

Pese a su poder económico, la poderosa clase dominante no tenía un brazo político para expresar su descontento y por ello apoyó de entrada el levantamiento comandado por José Figueres Ferrer.

Guerra del 48

El que sería el caudillo del Partido Liberación Nacional se alzó en armas entre marzo y mayo de 1948 impulsado por la anulación -por parte del Congreso- de las elecciones presidenciales de febrero de ese año y en las que el opositor Otilio Ulate Blanco derrotó a Calderón Guardia. El resultado de este sufragio es desconocido por un incendio -cuyo origen se desconoce-, situación que justificó la decisión del Congreso.

El 17 de abril de 1948, Manuel Mora y José Figueres se entrevistaron en Ochomogo. Foto tomada de periodicolibertad.org.

Sea como fuere, Figueres se hizo fuerte y tras 44 días de refriega, entró victorioso en San José, pues gracias al Pacto de Ochomogo (17 de abril de 1948), Mora y los “mariachis” aceptaron entregar la capital a Figueres. Calderón Guardia (y sus adeptos más cercanos) ya no estaba en el país, pues había tomado el camino del exilio, primero en Nicaragua y luego en México.

Instalado al frente de la Junta Fundadora de la Segunda República, Don Pepe llevó adelante toda una política económica y social que deparó un Estado Benefactor al mejor estilo del inglés John Keynes.

Esto posibilitó el fortalecimiento del Estado, lo cual dinamizó la economía y conllevó a cuestionar decididamente el modelo agroexportador, el cual ya daba muestras de caducidad.

Un nuevo modelo

Es por ello que entra a escena un nuevo modelo: el de sustitución de Importaciones, el cual pretendía producir algunos artículos industrializados o semimanufacturados con el objetivo de evitar su importación y, en consecuencia, driblar, al menos en parte, la dependencia con respecto a los potencias industrializadas, las mismas que dominaban el mercado internacional de bienes y servicios.

De esta forma, Costa Rica ingresa al Mercado Común Centroamericano (MCCA). Integrado por Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica, organismo que se rigió por el Tratado General de Integración Económica Centroamericana de 1960 y que estuvo vigente hasta el 2014.

El Banco Central de Costa Rica fue fundado el 27 de enero de 1950 durante la Administración de Otilio Ulate Blanco. Foto de archivo.

El objetivo primordial del MCCA fue unificar las economías e impulsó en forma conjunta el desarrollo de Centroamérica para mejorar las condiciones de vida de sus habitantes.

Para ello estimuló el comercio de mercancías en toda la región, indicador que para el periodo de vigencia creció en una tasa promedio anual del 11,1 por ciento (pasó de 30 millones de dólares en 1960 a 9.031 millones en el año 2014).

No obstante, el modelo de sustitución de importaciones pronto evidenció sus limitaciones, en especial, porque nunca consiguió implementar una sólida carpeta industrial, lo que imposibilitó su cometido: evitar las importaciones.

Además, se fracasó en la diversificación agricola y, por el contrario, se mantuvo la producción de café, banano y azúcar (postres), con lo cual se conservaba la dependencia hacia los mercados internacionales. Esta situación deparará otro fuerte trance con la crisis del petróleo a partir de 1970.

Personaje histórico

Fundador de la Segunda República

José Figueres Ferrer. Nació el 25 de setiembre de 1906 en San Ramón (Alajuela) y falleció el 8 de junio de 1990 en San José.

Este agricultor, empresario y político es un los tres costarricenses han sido Presidentes de la República en tres ocasiones. Don Pepe lo fue como mandatario del gobierno de facto tras la Guerra del 48 entre 1948-1949, y dos periodos constitucionales: 1953-1958 y 1970-1974.

José Figueres Ferrer fue el caudillo victorioso de la Guerra Civil de Costa Rica y se le considera el fundador de la Segunda República. Foto “Colección histórica del Museo Nacional de Costa Rica.

Fue el caudillo victorioso de la Guerra Civil de Costa Rica, lideró la Junta Fundadora de la Segunda República y desde esta posición decretó la abolición del ejército de Costa Rica, un hecho por el cual nuestra nación se convirtió en el primer país del mundo en suprimir sus Fuerzas Armadas. Este hito histórico marcará a los ticos en forma indisoluble.

Pero también tuvo otras decisiones que igualmente impactaron la vida social y económica en gran cantidad de generaciones.

Antes de alzarse en armas contra el gobierno de Rafael Ángel Calderón Guardia, Figueres fue apoyado por la oligarquía cafetalera, pero una vez victorioso, se separó de sus postulados y más bien defendió y amplió la reforma realizada por Calderón y los comunistas.

Una vez instalado en el poder, el nuevo hombre fuerte hizo evidente que tenía su propia agenda e impulsó la implementación del Estado Benefactor y con ello fundó la Segunda República.

Con él al mando, el Partido Liberación Nacional (PLN) llevó a cabo políticas públicas para satisfacer las demandas de amplios sectores sociales, lo cual le produjo importantes réditos electorales que le permitió tener el predominio político del país entre 1953 y 1978.

Oficina de José Figueres Ferrer en la Finca La Lucha, ubicada en San Cristóbal de Desamparados, San José. Imagen tomada del Grupo de Facebook “Fotos Antiguas de Costa Rica”, con autorización de su administrador, Allan Valverde.

Para ello tomó una serie de decisiones políticas como la abolición de ejército, la promulgación de la Constitución del 48, garantizar la pureza del sufragio, darle voto a la mujer, nacionalización bancaria, creación del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), del Consejo Nacional de Producción (CNP), del Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU), de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), del Hospital de Niños, del Banco Central, de la autopista General Cañas, de la Corporación Costarricense de Desarrollo (Codesa), Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), etc.

Además, fortaleció instituciones ya existentes como el Ministerio de Educación (MEP), de Obras Públicas y Transportes (MOPT), la Contraloría General de la República), Procuraduría General de la República.

Otro hecho que destaca en esta época fue que se plasmó en la Constitución Política (artículo 132) la prohibición de la reelección presidencial, un aspecto que fue derogado por la Sala Constitucional en el 2003 tras varios recursos gestionados por Óscar Arias Sánchez, integrante del PLN, que fue reelecto en el 2006.