Paula Ruiz
Los diputados reaccionaron con molestia a la decisión del presidente Carlos Alvarado de vetar la rebaja al marchamo para el 2022.
El jueves de la semana pasada, una amplia mayoría de congresistas aprobó la disminución en el impuesto sobre el valor de la propiedad pero, Alvarado decidió frenarlo.
Para la fracción del Partido Liberación Nacional (PLN), este es un golpe para el bolsillo de los costarricenses y un desconocimiento de lo que están pasando las familias.
“Este gobierno se ha mostrado insensible a las principales preocupaciones de los costarricenses, donde no ha sabido trazar la ruta clara para poder rescatar a Costa Rica en la reactivación económica”, dijo María José Corrales, jefa de fracción del PLN.
La verdiblanca Franggi Nicolás fue una de las congresistas que presentó esta iniciativa. Ella catalogó al mandatario como un insensible y a la vez, consideró una burla que se esperara hasta último minuto para proceder con el veto.
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“Una vez más, usted demuestra que es un insensible con la dura situación de crisis por la cual están pasando miles de costarricenses”, señaló Nicolás.
“Hoy, su gobierno, le dice a los costarricenses de que a pesar de la dura crisis que están viviendo y que a pesar de que el estado les ha limitado la posibilidad de circular por las carreteras con normalidad, el Estado aún así, se anima a meterle la mano en el bolsillo”, agregó.
Por su parte, el independiente Jonathan Prendas catalogó como una inmadurez la decisión del mandatario.
“El único responsable de que no baje el marchamo tiene nombre y apellido: se llama Carlos Alvarado”, criticó Prendas.
Para Wálter Muñoz, vocero de la bancada del Partido Integración Nacional (PIN), esto solo refleja que al jefe de Estado no le interesa favorecer al pueblo.
¿Resello?
Cuando un proyecto de ley es vetado, cabe la posibilidad de contrarrestar lo resuelto por el presidente a través de un resello que requiere 38 votos.
No obstante, el Congreso se ve imposibilitado a hacerlo porque primero requiere que el expediente 22.519 que contiene la rebaja en el marchamo para el 2022, sea convocado por el propio Gobierno.
Lo anterior porque, a partir del lunes inician las sesiones extraordinarias que implican que la agenda legislativa esté de manera exclusiva en manos del Poder Ejecutivo.
Por tanto, para analizar un proyecto de ley en la Asamblea Legislativa, requiere el aval del Gobierno mediante la convocatoria.
Dragos Dolanescu es otro de los legisladores que presentó esta iniciativa. Criticó que Alvarado esperó hasta este viernes, tan solo, unas horas antes de salir del país para hacer el anuncio.
“El Presidente Alvarado no tuvo los pantalones para vetarlo días anteriores, para que los diputados haberlo resellado con 38 votos que los teníamos”, criticó.
“Ya sabemos que es el presidente más impopular de América , más abajo que Ortega y Maduro”, continuó Dolanescu.
“Esperaría que el presidente si es consecuente y si es demócrata, convoque el proyecto para que la Asamblea Legislativa pueda tomar una decisión”, pidió, por su parte, Pablo Heriberto Abarca, jefe de fracción de la Unidad Social Cristiana (PUSC).
El rojiazul consideró como una burla que el presidente se haya esperado hasta este viernes para hacer el resello, cuando, este jueves, los diputados dejaron de tener el control de la agenda legislativa por el cierre de sesiones ordinarias.
Debido a este panorama, a partir del próximo lunes inicia el cobro del derecho de circulación sin la rebaja.
Adicionalmente, no aplicará la condonación de marchamos atrasados desde el 2014 hasta el 2021 porque estaba contenido en esta propuesta.
En el 2020, Alvarado sí firmó la rebaja en el derecho de circulación que aplicó para el 2021.
