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Juicio por muerte de Allison: OIJ confirma rastro de sangre de joven en carro del sospechoso

Durante el tercer día del juicio por la muerte de la joven Allison Bonilla, le tocó el turno de declarar…

Por Hermes Solano

Tiempo de Lectura: 3 minutos
Juicio por muerte de Allison: OIJ confirma rastro de sangre de joven en carro del sospechoso
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Durante el tercer día del juicio por la muerte de la joven Allison Bonilla, le tocó el turno de declarar al investigador del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Felipe Aguilar.

El oficial relató los hechos desde la desaparición de Allison el 4 de marzo de 2020 y hasta la aparición de los restos óseos el 28 de setiembre de ese año que confirmaron que se trataba de la víctima.

La investigación del OIJ ratificó la existencia de sangre de la joven de 18 años en la cajuela del carro del imputado de apellidos Sánchez Ureña y conocido como Sukia.

Eso se determinó a través de análisis químicos, pues a simple vista no llegó a observarse.

Además, se confirmó que el rastro de sangre encontrado en la finca La Flor también correspondían a Allison.

“El resultado de las muestras de sangre de la cajuela y parte plástica de la puerta de la cajuela indican que la sangre le pertenece a la ofendida Bonilla Vázquez”, indicó el investigador.

También se encontraron rastros de sangre, tanto en el asiento del conductor, como en el del acompañante. Según la acusación, el hombre metió a Allison en esa parte de su vehículo marca BMW después de golpearla.

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Cámaras de vigilancia

El OIJ determinó, a través de los videos de cámaras de seguridad, que a Allison nadie la estaba siguiendo una vez se bajó del bus de la ruta Cachí – Cartago. Pero sí se observa cuando el carro del sospechoso sale de la casa hacia el mismo trayecto que llevaba la joven.

“En las cámaras de la familia Solís Monge se ve cuando pasa Allison al frente a las 8:47 p.m. y un minuto y medio después de que la ofendida pasa se logra observar donde el vehículo del sospechoso sale de la propiedad y toma rumbo a Ujarrás, misma ruta que toma la ofendida”, indicó el investigador.

Además, se logró visualizar cuando el carro pasó a eso de las 9:20 de la noche del 4 de marzo con rumbo a Cachí, según las cámaras de seguridad del centro de recreo del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos.

Esto le permitió a las autoridades buscar a la joven en la represa de Cachí y en el basurero clandestino en el sector de San Gerónino de Cachí.

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Conversación por mensaje

El OIJ allanó al sospechoso días después de la desaparición de la joven y se decomisó además del vehículo, su teléfono celular.

Ahí, las autoridades descubren que dos días antes de la desaparición de la joven hubo una conversación entre ambos a través de una red social.

“Se logró determinar que el 2 de marzo este sujeto Sánchez Ureña la contacta por medio de la aplicación Messenger a Allison y mantienen una corta conversación”, dijo el investigador.

Aunque no recordó exactamente lo que decía la conversación, iba dirigida a que Sánchez Ureña le consultó a Allison si él le caía mal.

“No me caes ni bien, ni mal” habría sido la respuesta de la joven.

Las autoridades judiciales solicitaron una intervención telefónica para Sukia por un período de 3 meses luego de la desaparición de Allison, pero no obtuvieron información relevante para la investigación.

Doña Yendry (de rosado) se mostró muy afectado con el relato del investigador del OIJ.

Mamá afectada

Durante el relato dado por el oficial del OIJ, la madre de Allison, Yendry Vázquez se mostró muy afectada, principalmente cuando se habló del momento en el que se encontraron prendas de ropa de su hija.

Doña Yendry declaró el primer día de juicio y en las últimas audiencias estuvo presente como escucha del debate.

Sentada en la sala de juicios 1 de los Tribunales de Cartago, la mujer se sentó en dirección diagonal al sospechoso, al que observó poco a lo largo de la audiencia.

Ella estuvo acompañada por su hermana y otra familiar, quienes siempre fueron las que lideraron la búsqueda de Allison el año anterior.