Marco Marín
La principal aerolínea de los Países Bajos, KLM, suspendió a partir de este viernes todos sus vuelos semanales de larga estancia, así como todo aquel en destino europeo que requiera pasar la noche en el exterior.
Esta medida afecta un total de 270 vuelos intercontinentales, incluyendo los cuatro viajes semanales que la empresa estaba realizando, en las últimas semanas, entre Amsterdam-Alajuela-Liberia.
La compañía tomó la decisión luego de que el gobierno neerlandés anunció la imposición de nuevas restricciones sanitarias que incluyen exigir a pasajeros y miembros de la tripulación mostrar una segunda prueba rápida de covid-19, negativa, justo antes del abordaje del avión.
“En una conversación con el ICT la compañía manifestó que no puede correr el riesgo de que su tripulación se quede varada en algún lugar, por las medidas impuestas por su gobierno”, manifestó el ministro de Turismo, Gustavo Segura.
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Dos meses
La decisión tomada por la aerolínea se da menos de dos meses después de que la misma volviera a operar en el país, tras la apertura de las fronteras aéreas con Europa, el 1 de agosto de 2020.
KLM restableció sus vuelos a Costa Rica con dos viajes semanales desde el pasado 26 de noviembre, cuando un primer vuelo trajo a 165 visitantes. No obstante, estas cifras se podrían ver afectadas cuando la empresa holandesa vuelva al país.
Precisamente, este jueves, el director ejecutivo de KLM, Pieter Elbers, anunció el despido de 5,000 trabajadores. Esto como consecuencia del impacto financiero que sufrió la compañía a expensas del covid-19.
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Incluso, adelantó que en las próximas semanas otros 1.000 puestos de trabajo estarían corriendo el mismo riesgo.
“La disminución de personal en nuestra organización aún no toma en consideración las nuevas restricciones anunciadas por el gobierno holandés en las últimas 48 horas. Sin embargo, están en línea con las circunstancias con las que hemos tenido que lidiar desde el principio de la pandemia.
“No obstante, aunque las mismas tengan poca afectación en nuestras operaciones, la pérdida de empleos sigue siendo inevitable”, advirtió. Esto en particular ante posibles nuevas restricciones de otros países, más allá de Holanda.
Disminuyen ingresos
Las dificultades que experimentan las aerolíneas internacionales ha tenido una seria repercusión en la industria turística del país. El año pasado, el sector calculó sus pérdidas en $3.000 millones. Para el 2021, las perspectivas son poco esperanzadoras ya que la situación actual impide que se desarrolle la tradicional temporada alta.
El cierre de fronteras nacionales y el regreso a confinamiento en varios de los mercados emisores se conjugaron para que el país recibiera solamente 1.011.912 de entradas a los aeropuertos del país, según datos de la Dirección General de Migración y Extranjería.
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Esto también representa, solamente, una tercera parte de los más de 3 millones de personas que llegaron por esa vía durante el 2019.
Costa Rica solo estaría recibiendo entre el 25% al 30% del total de turistas internacionales que recibió en el 2019, según datos de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés). Sería hasta el 2024 cuando volvería al mismo nivel pre-pandemia.
Marco Marín
Las experiencias trascienden a los resultados. Tomar el camino menos transitado siempre hace la diferencia y los errores duelen menos cuando seguimos nuestro instinto. En lo periodístico, las palabras solo son herramientas pero, utilizadas adecuadamente, dan sentido a nuestras vidas. En síntesis: compren el tiquete, ajusten el cinturón de seguridad y disfruten del viaje.
