Sergio Arce
Judy Sheindlin, mejor conocida en Estados Unidos como la jueza Judy, anunció semanas atrás que se despide de la televisión con la temporada 25 de su afamado programa en CBS, que sale al aire en el horario matutino y es seguido cada día por al menos 10 millones de personas.
Ella es la mujer que imparte justicia en su estrado televisivo, aunque sus resoluciones no tienen alcance legal, salvo porque ambas partes aceptan de común acuerdo aceptar el veredicto de esta mujer de 77 años.
“Quienes se prestan al código jurídico-moral de Judy saben que vivirán sus minutos de gloria y, por un rato, en esa franja televisiva serán estrellas. La juez Judy no deja acabar las frases de quien cree que está mintiendo o escabulléndose con excusas para eludir su responsabilidad. ‘No soporto la estupidez, no soporto la indolencia’, comentaba en una entrevista hace algunos años”, publicó el diario español El País.
Y el morbo que produce cada episodio -en especial cuando esta licenciada en Derecho en la American University de Washington se muestra intransigente, dura y que suele gritarle a los comparecientes- le ha deparado la nada despreciable cifra de $47 millones en ingresos cada año.
La revista Forbes estima su fortuna en $440 millones, tanto así que en junio del 2019 la nombró una de las mujeres más ricas en Estados Unidos. Lo más sorprendente es que ese dineral es producto de 52 días de filmación al año. En un cuarto de siglo han salido al aire más de 5.200 episodios.
Su trayectoria en televisión no ha estado exenta de la polémica, puesto que numerosos artículos han criticado el “circo mediático-moral” de la jueza Judy, pero reconocen que se trata de un formato millonario ($100 millones en ingresos al año para CBS), exitoso (es el más visto de la franja matutina) y que ha trascendido.
Prueba de ello es que en el 2015, el libro de los récord Guinness la incluyó como la jueza con más años en la televisión. Y ahora es la presentadora-animadora mejor pagada de Estados Unidos.
