Deportes

La Sabana no tiene quien la visite

Se acabó la algarabía que siempre reinaba en La Sabana. El mayor remanso de deportes y recreación de que dispone…

Por Harold Leandro

Tiempo de Lectura: 3 minutos
La Sabana no tiene quien la visite
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

Se acabó la algarabía que siempre reinaba en La Sabana. El mayor remanso de deportes y recreación de que dispone la capital hoy está desolado y la razón es muy sencilla: las medidas ordenadas por las autoridades y acatadas por la mayoría de la población por la pandemia de coronavirus que afecta a todo el mundo.

El que siempre es escenario de constantes actividad deportiva, con mejengas de fútbol, baloncesto, voleibol de playa, beisbol, softbol, tenis, etc., hoy está vacío.

En el Patinódromo Nacional nadie se entrena. Foto Harold Leandro.

Tampoco hay ciclistas, patinadores ni corredores. Se debe esperar un buen rato para observar a alguna persona que haga alguna actividad física a pie o en bicicleta, pues las directrices de las autoridades sanitarias es quedarse en la casa.

El laguito de La Sabana no solo está sin agua, sino que también sin personas a su alrededor. Foto Harold Leandro.

Al igual que las calles josefinas, las 72 hectáreas que componen el Parque Metropolitano La Sabana presentan un desamparo total pues los josefinos que llegan se cuentan con los dedos de una mano.

Esta situación ha causado graves problemas a aquellos que realizan algún tipo de trabajo en la explanada.

José Gómez y su hijo Stanley era de los pocos que este martes estaban en La Sabana. Foto Harold Leandro.

Estos son los caso de Kerlin Vargas y Wimer Bonilla. La primera ciuda carros en la parte trasera del Gimnasio Nacional, dentro de La Sabana, y el segundo administra el servicio sanitario cerca del Estadio Nacional.

“Desde que apareció COVID-19 esto se vino a pique” dijo Vargas, quien agregó que ella solo se presenta al sitio de trabajo para “no perder el campo, porque ahora no da ni para subsistir”.

En las canchas de baloncesto nadie juega. Foto Harold Leandro.

Por su parte, Bonilla -sentado en su pequeño escritorio-, confesó que este jueves hasta las 10:30 a. m. cuando se le consultó “no ha llegado ni una sola persona a utilizar los baños”.

Esta ausencia de deportistas en La Sabana está en consonancia que la orden de la Municipal de San José y el Instituto Costarricense del Deportes y la Recreación (Icoder) de cerrar todos lo parques y sitios donde se realizan actividades deportivas y recreativas en acatamiento de las ordenes sanitarias.

El área de juegos infantiles luce desolada. Foto Harold Leandro.

El único espacio que presenta alguna actividad igual a la cotidianidad es la Unidad de Policletos, una oficina del Ministerio de Seguridad que concentra a los agentes que cuidan La Sabana, la cual surgió en 1783 cuando el sacerdote Manuel Antonio Chapuí y Torres donó esos terrenos para el disfrute de los capitalinos.