Hermes Solano
Vivian Leal trabajaba como educadora en 2003. Casada y con tres hijos de 2, 4 y 9 años, vivía a plenitud a sus 29. Pero ese año recibió una noticia que le cambiaría por completo la vida.
Tras sentirse mal de salud se realizó chequeos médicos y el diagnóstico la dejó en “shock”: tenía cáncer de seno avanzado, en grado 4, que significa que hizo metástasis.
Le realizaron una gran cantidad de análisis, que incluyeron biopsias y los resultados fueron los peores: el cáncer se extendió al hígado y le dieron tres meses de vida.
“Es un impacto. Es ver como se mete un terremoto en tu casa. Tenía 29 años y me decían los médicos que lo que yo tenía les da a las mujeres de 80”, contó Leal en charla con El Observador.
Al recibir la expectativa de vida dada por el médico, su primer pensamiento fueron sus hijos, que le dieron el impulso para pelear y no rendirse ante la enfermedad.
“Emprendimos la lucha, empecé a someterme a diversas cirugías, que en total fueron 12 y tuve 10 años de quimioterapias, así como diversos tratamientos”, señaló.
Contra todo pronóstico, Leal fue superando la enfermedad y aumentando su expectativa de vida, que hoy, 18 años después, la tiene ya en remisión del cáncer.
“Estoy en remisión, no tengo cáncer manifestado en ningún lado de mi cuerpo. Hace dos años fue mi última cirugía y ahora padezco de diabetes e hipertensión a raíz de la toxicidad de los medicamentos”, contó la mujer.
Vivian enfrentó la enfermedad con una actitud positiva.
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Hacer algo
Conforme superaba las etapas de su enfermedad, Vivian tomaba fuerza para seguir luchando y recibió un mensaje o consejo de su doctor.
“Si quedó viva, haga algo” me dijo mi oncólogo”, recordó Leal.
Por eso, superadas las fases más complicadas de la enfermedad y luego de que se pensionó por invalidez en 2005, esta mujer comenzó a estudiar psicología y a obtener certificaciones en coaching sobre transformación y bienestar.
Eso la llevó en 2014 a crear una ONG llamada Destrezas para la Salud, donde plasmó estrategias de ayuda idónea al paciente con cáncer y otras patologías.
“Estructuramos una herramienta y estrategia donde trabajamos con el paciente, su familia, su entorno y creamos estrategias multidisciplinarias de soluciones reales”, señaló.
“Me he dedicado a trabajar con los pacientes, me encanta que tengan esas alternativas para sobrellevar la enfermedad”, dijo, mencionando la importancia de varios elementos para saber afrontar el cáncer.
“Cómo yo puedo abrazar y reconciliarme con mi diagnóstico para lograr un abordaje integral y querer avanzar. Nos peleamos con la vida, entramos en rechazo, ¿por qué a mí? ¿para qué? Y son cosas que la gente no lo hace porque quiere hacerse daño, sino porque no conoce las herramientas para luchar”, dijo.
Actualmente, Vivian trabaja con pacientes que luchan contra la enfermedad.
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Federación de Pacientes
Leal es actualmente la presidenta de la Federación de ONGs de Pacientes en Costa Rica, una entidad que cuenta con la alianza de 42 organizaciones de diferentes patologías, entre ellas 17 de cáncer.
“Ha sido un reto interesante en conjunto con alianzas estratégicas y hemos tratado de visualizar para llevar a los tomadores de decisiones y a las mesas de diálogo nacional los temas macro respecto a esta situación”, dice.
Ellos trabajan para que el paciente de cáncer tengo un camino más allanado en su lucha, buscando accesibilidad a los tratamientos y apoyo psicológico, que es vital.
“Cuando uno está en esta lucha, uno tiene resiliencia, un segundo aire, esa conexión con la vida, porque hay que entender que un diagnóstico viene y toca su cuerpo, pero no tu ser”, explicó Leal.
“Entendí que cuando la enfermedad nos visita se debe ver en un plano integral y solo deben pasar dos cosas muy buenas: si se sale adelante, que sea con calidad de vida, o si uno muere, saber que es una meta a la que vamos todos”.
En 2020, en Costa Rica murieron 427 mujeres a raíz del cáncer de mama.
