Límite a tasas de interés: ¿qué riesgos podría traer?

La fijación de un tope a las tasas de interés es una discusión que aún se mantiene dentro del seno de la Asamblea Legislativa, y que se sigue con atención por las entidades financieras y sus usuarios. 

Para algunos expertos, limitar de manera arbitraria o general las tasas de interés podría traer consigo riesgos como el cierre de oportunidades al créditos a un grupo de costarricenses o el aumento de las prestaciones ilegales, o bien, el aumento de las tasas de interés a deudores de bajo riesgo. 

• Exclusión del sistema formal

Para Javier Cascante, ex Superintendente General de Entidades Financieras, si la fijación del tope se hace a una tasa de interés “baja”, las operaciones de crédito que se consideren más riesgosas podrían ser excluidas de las oportunidades de financiamiento por parte de los acreedores. 

“Una tasa máxima baja, podría excluir del financiamiento no sólo potenciales deudores que, por su naturaleza laboral, socioeconómica y profesional, sean de mayor riesgo que el promedio; sino también proyectos de inversión que, siendo riesgosos, son rentables”, indicó Cascante. 

Por su parte, el presidente del Banco Central, Rodrigo Cubero, también advirtió sobre los posibles riesgos que traería establecer un tope máximo a los intereses alrededor del 30% o 35%, como la exclusión de un grupo de costarricenses del sistema financiero. 

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Con esto concuerda el economista Gerardo Corrales, que aseguró que al definir un tope muy bajo se obliga a los intermediarios a excluir a los clientes que no son rentables, o bien, que generan costos y pérdidas por encima del tope. 

• Préstamos ilegales

Otro de los riesgos asociados al tope de las tasas de interés es la proliferación de préstamos informales. Al ser excluidos de los sistemas financieros formales, los costarricenses podrían optar dichas opciones no reguladas por las autoridades financieras.

“Las necesidades de financiamiento de esas personas no desaparecen. Van a requerir siendo financiadas pero lo van a hacer de otra forma”, manifestó Corrales. 

“Una ley supuestamente concebida para proteger a los más pobres, podría más bien enviarlos a la informalidad y a tasas de interés más altas”, dijo Corrales sobre el proyecto de ley N° 20.861. 

La Asociación Bancaria Costarricense también encendió las alarmas frente a la posibilidad de que el proyecto de ley sobre tasa de usura, se apruebe en la Asamblea Legislativa.

“Con los topes que se pretenden establecer con el proyecto de ley, sin duda se propiciaría un aumento de la informalidad y mercados paralelos”, aseguró la asociación ante los diputados.

“Las necesidades económicas o malos hábitos sobre el endeudamiento de las personas no desaparecerán con el establecimiento de topes a las tasas de interés de los créditos”, añadieron.

Asimismo, según sus cálculos, el establecimiento de topes a las tasas de interés de las tarjetas de crédito, por ejemplo, implica que aproximadamente un millón de personas perderían el acceso al crédito.

• Recaudación de Hacienda afectada 

La Asociación también citó, entre los principales riesgos de imponer topes, la disminución de la recaudación que hace el Ministerio de Hacienda a través de la retención que se realiza a los comercios por las compras realizadas con tarjetas de crédito.

Esto, porque crecería el manejo de efectivo al aumentarse la informalidad. Es decir, se disminuiría el uso de medios de pago modernos y digitales.

• Altas tasas

Por otro lado, si el tope de usura se determinara en un alto porcentaje, las entidades financieras podrían optar por cobrar el máximo permitido, lo que generaría que los deudores con riesgos bajos paguen tasas de interés más altas. 

“Fijar arbitrariamente las tasas de interés, podría más bien legalizar la usura, porque se establece un nivel tan alto para ciertos productos, que no tienen relación con sus riesgos o costos administrativos”, comentó Corrales. 

Por su parte, Cascante planteó que, si la preocupación son las prácticas abusivas en perjuicio de los usuarios financieros, sería conveniente explorar otras soluciones. Tal como que se opere un supervisor que tenga incluido en su accionar, velar por una adecuada conducta y disciplina de los participantes en el mercado. 

Asimismo, Corrales aseguró que en caso de definir tasas de usura, estas deben ser de acuerdo al tipo de actividad que se desea financiar.

“No se puede definir un solo límite de usura, porque los productos financieros son distintos en cuanto a sus costos y sus riesgos”, explicó el economista. 

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