La candidata Lineth Saborío del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) criticó los efectos generados por la denominada Ley de Usura que ya excluyó a 180.000 personas del sistema financiero.
En respuesta a El Observador, Saborío informó que su posición la recoge del criterio emitido por su equipo económico.
“La ley 9859 contra la usura equivoca lastimosamente las relaciones de causa y efecto- al tratar de controlar los efectos de las altas tasas de interés sobre las tarjetas de crédito en los sectores más vulnerables con menores garantías crediticias y otras condiciones adversas de riesgo de la población, sin analizar las causas del problema”, señaló la aspirante.
Incluso, la comparó una legislación promovida por el Partido Liberación Nacional (PLN) para mitigar la inflación mediante el control generalizado de precios y márgenes de utilidades.
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“Hubo que demostrarle, mediante una reforma a la ley de Protección al Consumidor en el período 90-94, que la forma más efectiva de combatir el aumento de precios era mediante una sana política monetaria del Banco Central y reformas estructurales para incrementar la sana competencia”, recordó.
Para Saborío, la ley de usura tiene los mismos yerros que la propuesta de control de precios que tuvo el PLN en ese momento.
De esta manera, se pretendió limitar las tasas de interés provocando la exclusión de miles de personas del sistema financiero formal, resaltó la candidata.
El Banco Central reveló que esta legislación excluyó a 180.000 clientes del sistema porque no pueden cumplir con los requisitos establecidos.
Educación financiera
La propuesta de Saborío para contrarrestar los efectos de esta Ley, es educación financiera para los excluidos del sistema.
“Consideramos, además, que es necesario estimular y fomentar la educación financiera a todo nivel”, dijo.
“Pues a esos sectores les caería muy bien recibir conceptos básicos de finanzas personales, elaboración de presupuestos, valor del dinero en el tiempo, interés compuesto, tasas reales de interés para poder defenderse adecuadamente en la vida”, agregó la socialcristiana.
“Todas estas causas y soluciones deben ser atendidas debidamente antes de pensar en control de precios”, continuó.
A su criterio, la Ley de Usura no resolvió la problemática del financiamiento a sectores vulnerables, donde enumeró:
- Altas tasas de interés y fraccionamiento (dispersión) del sector financiero por insuficiente competencia
- Acaparamiento del crédito por el Gobierno debido a su incapacidad de resolver el desequilibrio fiscal
- Inclinación de los bancos y entidades financieras a adquirir bonos del Gobierno, restando disponibilidad y liquidez a los demás usuarios de crédito, lo que redundaría en menores tasas de interés;
- Mal funcionamiento de la banca de desarrollo y exigencia de requisitos inaccesibles a estos usuarios de crédito vulnerables;
- Alto desempleo ocasionado por ausencia de reformas estructurales y mal manejo de las restricciones por la pandemia, que erosiona el ingreso disponible de muchas personas y lo hace caer en manos de agiotistas
- Abandono estatal de muchas personas que los hace necesitar financiamiento caro para atender sus necesidades insatisfechas
Por otra parte, Eli Feinzaig del Liberal Progresista y José María Figueres del PLN, aseguraron que se debería revisar el alcance de la ley.
Mientras el candidato del partido oficialista y g
Ramos defendió la situación. El candidato del partido de gobierno consideró que las tasas de interés de las tarjetas “hundían a estas personas y sus familias en un círculo de endeudamiento sin posibilidades de salir adelante”.
La candidata consideró que debe de darse educación financiera a los sectores vulnerables. En la imagen, la aspirante durante una gira realizada este fin de semana en Puntarenas. Foto: prensa Lineth Saborío,