Rodrigo Díaz
La baja en el suministro de alcohol por parte de la Fábrica Nacional de Licores (Fanal) pone en una situación complicada a varias empresas que dependen de ese insumo para su producción.
Así lo hizo ver la Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (Cacia), que aseguró que en algunos casos el desabastecimiento podría representar incluso la paralización de la actividad.
La situación es compleja debido a que Fanal es la única autorizada por ley para distribuir alcohol en el país. Por tanto, las empresas no pueden buscar otros proveedores para atender su demanda.
Mientras, Fanal espera que la producción se reanude la próxima semana. Para ello, espera que que se apruebe un presupuesto por ¢4 mil millones que en este momento se encuentra bajo estudio de la Contraloría General de la República.
Impacto en la industria
De acuerdo con Cacia, varias empresas han reportado su preocupación por el faltante del alcohol para sus procesos productivos.
“El impacto en la industria es importante dado que para algunas empresas es una materia prima de utilización directa en la producción o también es utilizado para operaciones de limpieza y desinfección de equipos”, comentó Mario Montero, vicepresidente ejecutivo de Cacia.
Montero no precisó el nombre de las empresas afectadas. Pero señaló que se trata de industrias que requieren la materia primera para el desarrollo de algunas bebidas, aplicaciones de materias primas en confitería y el desarrollo de saborizantes.
“Para la industria es inviable tener que parar la producción por lo que estamos solicitando a las autoridades respectivas tomar las decisiones que sean necesarias para permitir el debido abastecimiento”, puntualizó Montero.
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Aprobación necesaria
Una vez más, Fanal achaca el problema a la situación de la pandemia y a la regla fiscal. Así lo reconoció Ángel Jiménez, presidente ejecutivo del Consejo Nacional de Producción (CNP), institución que controla Fanal.
“No es que le estemos negando alcohol a las empresas, sino que no tenemos suficiente para satisfacer la demanda al 100%. Sí lo hacemos, pero a un menor porcentaje”, reconoció el jerarca.
Debido a la regla fiscal, el CNP sobrepasó el límite de su presupuesto y no está autorizado para hacer más compras.
Por ello, solicitó hacer valer una “cláusula de escape” a la regla fiscal a la Comisión Nacional de Emergencias (CNE). Esto le permite solicitar más recursos para completar el ejercicio fiscal del 2021.
Pero ahora hace falta la aprobación de un presupuesto de ¢42.000 millones a la Contraloría General de la República. Dentro de este plan de gastos está el monto de ¢4.000 millones para la compra de aproximadamente 6 millones de litros de alcohol.
Esta cantidad sería suficiente para suplir las necesidades de abastecimiento por el resto del año. De acuerdo con Jiménez, solo se requiere el aval para comprar de inmediato el producto a la Liga Agrícola Industrial de la Caña (Laica).
El presupuesto se encuentra en la Contraloría desde inicios de este mes. Si bien el CNP confía que para este viernes haya una resolución, el ente contralor tendría tiempo hasta la otra semana para analizarlo.
Sin la aprobación de presupuesto, Fanal no puede, por impedimento legal, hacer la compra de la materia prima necesaria que le permita producir el alcohol para que las empresas para que recuperen su línea de trabajo.
De momento, el problema no afecta las entregas a la Caja Costarricense de Seguro Social. Según Jiménez, todavía existe inventario para suplirla por un mes y medio más, aproximadamente.
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Dependencia de un monopolio
La situación se complica para las empresas que requieren de alcohol para sus procesos productivos, debido a que por ley solo pueden comprarle a Fanal.
La ley establece que Fanal tiene la exclusividad para la elaboración del alcohol y el ron que sirven de materia prima para productos finales en el país.
Es decir, las empresas no tienen otro proveedor en el mercado. La única excepción sería para la producción de insumos que se vendan en el extranjero, aclaró Fanal.
Jiménez defendió el monopolio, al asegurar que dentro del contexto de la pandemia, esto permitió al país beneficiarse al garantizarse el suministro con el mismo precio.
Añadió que el desabastecimiento de alcohol fue una situación que no se había presentado antes en el país.
No obstante, en marzo de 2020, la Comisión para la Promoción de la Competencia (Coprocom) se pronunció, junto con otros sectores de la sociedad, para abrir el monopolio de la venta de alcohol en el país.
En ese momento se cuestionó que solo Fanal vendiera alcohol en momentos en que había problemas de suministro en las familias de este producto, necesario para la prevención del covid-19.
Jiménez, por su parte, señala que en estos momentos las farmacias y supermercados tienen suficiente alcohol en sus anaqueles para venta al público.
Rodrigo Díaz
