Tomás Gómez
El Gobierno se enrumba a su segundo año, que suele ser clave para varios temas, incluyendo la continuidad del Ministro de la Presidencia.
Salvo Rodrigo Arias, que trabajaba al lado de su hermano Óscar, en los últimos 30 años todos los Gobiernos han debido remozar la cartera antes de llegar a la mitad de su periodo.
La pregunta se le hizo directamente a la actual jerarca, Natalia Díaz, y según ella, espera superar esa marca.
“Yo esperaría culminarlo, no depende solamente de mí”, señaló.
Con los remozamientos del Gabinete del mes pasado, su nombre estuvo rodeado de rumores y hasta se mencionaron posibles sustitutos; como el exdiputado del PUSC y actual embajador en México, Pablo Heriberto Abarca.
No obstante, Díaz sostiene que no escuchó de esos posibles sustitutos.
“No se quien era el sucesor, eso sí no tengo idea”, señala.
Díaz defiende gestión
Hace poco más de un año, tras su participación como candidata de Unidos Podemos, Díaz dio la adhesión a Rodrigo Chaves. Según insiste, llegó con poca información.
“Yo me incorporé en la segunda etapa, ya en la segunda ronda. No conocía muy bien el Presidente, no conocía a doña Pilar, no conocía a la fracción y aún así eso representó para mi una oportunidad”, afirma.
Ya ratificada como Ministra de la Presidencia, afirma que mantiene el contacto con todos los grupos en la Asamblea. Según ella, va “una o dos veces por semana” a la Asamblea y telefónicamente el contacto es seguido.
“Yo lo que hago es que converso regularmente con jefes de fracción o con los diputados que por ejemplo me solicitan alguna reunión”, indicó.
De paso, defendió que su rol la obliga a atender los más diversos asuntos, que van desde asuntos de cámaras empresariales hasta problemas de agua o con un puente en una comunidad.
“Casi que todas las solicitudes llegan acá y yo traslado a los diferentes ministerios”, cerró.
¿Cómo evalúan a Natalia Díaz?
Otro de los elementos del actual Gobierno es que, según Rodrigo Chaves, los jerarcas están bajo evaluación.
En cada cargo hay indicadores y el Ministerio de la Presidencia no es la exepción.
De sus indicadores, Natalia Díaz asegura que le ven la gestión de los proyectos de ley, su aprobación y el seguimiento a los planes de reforma del Estado. También la generación de reglamentos y el plan de “cuellos de botella”.
En la misma línea, afirma que mantiene una buena relación con el Presidente.
“Yo me sorprendo porque a él no se lo olvida nada. Él sabe lo que uno está debiendo, el tiene todo eso muy bien identificado. “, cuenta la Ministra.
Sostiene que cuenta con la libertad de actuación.
“Yo le puedo decir que las decisiones, salvo algunos temas ya que amerite, yo las tomo directamente con la Asamblea Legislativa y el me ha dado esa libertad para hacerlo. Yo creo que esa confianza entre el presidente y el Ministro de la Presidencia es clave”, puntualizó.
“Si usted tiene que estar prácticamente hablando con el presidente todo el día para tomar decisiones en un congreso junto con la jefa de fracción realmente las cosas no podrían caminar de la misma manera”, agregó.
El puesto movido
Un recorrido por las últimas administraciones da fe de la volatilidad que tiene el cargo del Ministerio de la Presidencia.
Así, los movimientos por administración han sido:
- Rafael Ángel Calderón (1990-1994): Rodolfo Méndez estuvo en el puesto del inicio del Gobierno hasta 1992, cuando fue trasladado a la cartera de Hacienda.
- José María Figueres (1994-1998): a los 10 meses de gestión solicitó la renuncia a Elías Soley; por desacuerdos entre el funcionario y el resto del Gabinete.
- Miguel Ángel Rodríguez (1998-2002): las críticas de la Asamblea Legislativa y el fracaso de una reforma al Instituto Costarricense de Electricidad provocaron la salida de Roberto Tovar el 15 de julio de 1999.
- Abel Pacheco (2002-2006): Rina Contreras fue la primera mujer en ocupar el Ministerio de la Presidencia. No obstante, su carrera acabó a los 10 meses, luego de que los diputados opositores dejaran de reconocerla como enlace con Casa Presidencial.
- Laura Chinchilla (2010-2014): la experiencia acumulada por Marco Vargas – quien también encabezó el Ministerio en la década de 1990 – no fue suficiente y debió renunciar por “pérdida de espacios políticos” antes del primer año de gestión.
- Luis Guillermo Solís (2014-2018): pese a la defensa que hizo de su amigo Melvin Jiménez, Solís debió aceptar su salida el 16 de abril del 2015.
- Carlos Alvarado (2018-2022): Rodolfo Piza era la cara más visible del “Gabinete de Unidad”, pero su salida siempre fue un rumor. Esta se concretó el 29 de julio del 2019 y en medio de su despedida trascendió que iba a un cargo en la OEA.
