Tomás Gómez
En síntesis: los planes de seguridad del presidente salvadoreño Nayib Bukele requieren un financiamiento que deberían aprobar los diputados y para presionarlos se movilizó al ejército al punto que los soldados ingresaron al salón de sesiones legislativas.
Así es como resume la crisis política que desde hace una semana afecta a la nación centroamericana y que El Observador abordó con analistas de ese país.
Autoritarismo, irrespeto a la ley y cálculo electoral forman parte de las razones que explican un cambio en la estrategia de Bukele, un mandatario que venía ganando popularidad y respaldo de la comunidad internacional.
Cinco preguntas clave
El abogado y analista político Francisco Bertrand explicó que Bukele llevó al país a esta situación mediante interpretaciones convenientes de la ley.
Desde su óptica, el problema se puede entender con los siguientes elementos:
- ¿Cómo está el escenario político?: en febrero del 2019 Nayib Bukele arrasó en la elección presidencial con el 53% pero con apenas 9 diputados de 84. Ese desequilibrio ha complicado las negociaciones y Bukele ha optado por recurrir a la presión y las redes sociales.
- ¿Qué motivó la crisis?: el Gobierno ha impulsado un plan de seguridad que para su nueva fase requería un financiamiento de $109 millones a aprobarse por la Asamblea Legislativa. Para asegurarse el resultado Bukele convocó a los diputados a sesionar un domingo en medio de una manifestación y el la fuerza militar.
- ¿La ley respalda la actuación del presidente?: a criterio de Bertrand el gobierno se está valiendo de remanentes antiguos de las leyes salvadoreñas que permitían la convocatoria urgente cuando no habían buenos sistemas de comunicación, condiciones que no son equiparables al contexto donde las invocó el presidente.
- ¿Por qué generar caos?: la constitución salvadoreña habilita la “insurrección” del pueblo cuando las autoridades incumplan la ley. La ausencia a la sesión del domingo generaría ese supuesto y algunos diputados podrían ser destituidos.
- ¿Hay alguna solución?: dentro del marco legal, la opción es recurrir al tribunal constitucional, que este lunes entró a estudiar la posible nulidad de las acciones presidenciales y ordenó a Bukele no usar las fuerzas armadas para actividades fuera del mandato de la Carta Magna.
Según el experto el tema tiene también tintes electorales pues el próximo año se celebrarán comicios legislativos.
“Visto de lejos la estrategia del presidente es para afianzarse él y mostrar a los partidos tradicionales como las cosas que deberían desaparecer”, comentó.
La estrategia buscada por Bukele, sin embargo, podría terminar por generarle efectos contrarios a la popularidad sobre la que se había asentado hasta el momento.
“El usó mucho de su capital político para esto que hizo, lo que logró cuando metió los soldados al salón de sesiones fue recordar los golpes de estado militares, eso generó una sensación de estupor que no era necesaria”, dijo.
Una crisis grave que era previsible
Para explicar los acontecimientos de las últimas horas el representante de Transparencia Internacional en El Salvador, Roberto Rubio, recurre a elementos del propio Bukele y la falta de fuerza del estado salvadoreño.
“Él tiene un talante muy autoritario y el hecho de que tenga en frente instituciones débiles, que no tenga mucha oposición de partidos y que al mismo tiempo se sienta montado en una ola de popularidad hizo que creyera que tenía carta libre para hacer lo que quisiera”, analizó.
A concepto de Rubio, desde los Acuerdos de Paz no se veían un escenario tan complicado pero desde el arranque de la administración de Bukele hubo rompimientos de la ley en temas como despidos ilegales e incumplimiento en el acceso a la información.
“Bukele se ha montado en una narrativa relativamente exitosa en la que los diputados y los partidos son los malos y él el es bueno”, explicó el experto.
Rubio narró también que la crisis en este momento se limita a lo político-institucional y que San Salvador se mantiene tranquilo pese a los llamados del presidente a manifestarse.
A la espera de una resolución final del tribunal constitucional los diputados se reunirán esta semana para analizar acciones contra el Ministro de Defensa por haber facilitado la presencia militar.
Fiel a su estilo, Bukele dijo que les daba una semana más de plazo para la aprobación del crédito.
