Destacado

Aviación Civil debe a la FAA 5 enmiendas más para recuperar categoría 1 de seguridad aérea

La Dirección General de Aviación Civil (DGAC) arrastra aún cinco enmiendas solicitadas por la FAA de Estados Unidos para poder recuperar…

Por Marco Marín

Tiempo de Lectura: 4 minutos
Aviación Civil debe a la FAA 5 enmiendas más para recuperar categoría 1 de seguridad aérea
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

La Dirección General de Aviación Civil (DGAC) arrastra aún cinco enmiendas solicitadas por la FAA de Estados Unidos para poder recuperar la categoría de seguridad aérea que perdió el país en mayo pasado.

Una auditoría de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) arrojó, en mayo anterior, que las autoridades costarricenses no implementaron, en plazos razonables, señalamientos hechos por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), por lo que se degradó la categoría de seguridad aeroportuaria del país.

Esto afecta el desarrollo de nuevos vuelos, lo que también daña la imagen internacional del país.

En total, se habían apuntado 22 enmiendas solicitadas por la institución estadounidense, de las cuales ya se completaron 17.

Estos cambios son necesarios para que el país se adhiera, por completo, a los estatutos y anexos de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).

Guillermo Hoppe, director de Aviación Civil, lideró las negociaciones en Washington con representantes de la FAA. (archivo)

Los pendientes

  • Enmienda #1: Según la entidad norteamericana, la DGAC debe tener un sistema para garantizar que las regulaciones ticas cumplan con los requisitos del anexo seis de la OACI, en este caso, haciendo énfasis en las certificaciones de los operadores de aviones de transporte.

Para corregir esta falta, la DGAC hizo una revisión de las normativas actuales e incluyó las últimas enmiendas del anexo seis de la OACI.

Mientras tanto los operadores de aviones de transporte actualizan los documentos y sistemas pertinentes para estar al día. Por otro lado, se tramita la creación de los Procesos de Regulaciones para las Unidades de Aeronavegabilidad, Licencias y Operaciones Aeronáuticas, con tal de establecer estos cambios de forma legal.

Según la OACI, el anexo seis busca estandarizar las operaciones de las aeronaves de transporte aéreo internacional, con tal de tener mayor eficacia y seguridad.

  • Enmienda #2: La FAA exige que el Estado implemente las provisiones de los anexos 1, 6 y 8 de la OACI. El primer apartado se centra en las licencias del personal aeronáutico, mientras que el octavo desarrolla normativas de aeronavegabilidad.

Por esta razón, la DGAC debe enmendar los regulaciones ticas, con tal de que cumplan con las normas y prácticas recomendadas por la organización mundial y que están estipuladas en los tres anexos mencionados.

La rebaja en la categoría afecta a las aeronaves, de bandera nacional, que quieran abrir nuevas rutas o modificar planes de vuelo, una vez aprobados. (Marco Marín/El Observador)
  • Enmienda #3: La FAA solicita que los poseedores de certificados de Operador Aéreo (AOC, por sus siglas en inglés), cumplan con los requisitos de autorización especial, tanto del país como de la OACI.

Para lograr esto, la DGAC acordó crear un procedimiento para vigilar el mantenimiento de altitud de, al menos, dos aviones de cada operador aéreo nacional, durante un periodo menor a los dos años o 1000 horas de vuelo.

Esta norma fue aprobada hasta el 1° de febrero de este año, según se desprende del oficio DO-004-2018 y el cual fue firmado por Hoppe. La medida habría sido suficiente, sin embargo la DGAC no habría informado a la entidad norteamericana de forma oportuna.

Ahora deberá proveer a la FAA, de manera regular, reportes de las autorizaciones especiales que se hayan dado, que sean de su interés. Por lo tanto, la primera de estas actualizaciones debería de estar lista antes de octubre, para cumplir con la meta establecida por Hoppe.

Los operadores de aviones de transporte deben de poner al día sus documentos y sistemas para que se acoplen a lo solicitado por la OACI.
  • Enmienda #4: Los estadounidenses señalan que la DGAC debe garantizar que las regulaciones costarricenses cumplan con los requisitos del Estado del Operador de acuerdo al Anexo 6 de la OACI.

Para corregir esto, la DGAC habria incorporado el apendice II, del anexo mencionado, a la normativa tica. Ahora, solo faltaría que las empresas aéreas pongan al día sus sistemas y documentos.

  • Enmienda #5: La FAA solicita una modificación del artículo 31, de los estatutos de la Corporación Centroamericana de Servicios de Navegación Aérea (Cocesna), para evitar un traslape de responsabilidades entre la DGAC y la Agencia Centroamericana de Seguridad Aeronáutica (ACSA).

La misma estaría resuelta para agosto, ya que ocupa el visto bueno del Consejo de Cocesna. Cabe recordar que esta Corporación es un ente intergubernamental.

La FAA anunció que supervisará que el país cumpla con los requisitos solicitados, antes de subir la categoría nuevamente. (Marco Marín/El Observador)

La caída a la categoría 2

El 13 de mayo pasado las autoridades estadounidenses decidieron rebajar la categoría de la seguridad aérea del país de 1 a 2 luego de llevar a cabo una auditoría.

En la revisión, que abarcó más de 600 puntos de las normativas costarricenses en función de la seguridad aérea, la FAA detectó fallas en la administración de aviación civil que se arrastran desde hace una década.

La rebaja afecta directamente a las operaciones aéreas de bandera tica ya que no pueden abrir nuevas rutas a los Estados Unidos o modificar los planes de vuelo, una vez aprobados, en las rutas actuales.

Desde entonces, tanto Guillermo Hoppe, director de Aviación Civil, como Rodolfo Méndez, ministro de Obras Públicas y Transportes (MOPT), han sido escuetos para referirse al tema, hasta ahora.