Paulo Villalobos
Dos organizaciones criminales alcanzaron un acuerdo de no agresión, con el fin de poder vender drogas en Las Gradas de Pueblo Nuevo, en el centro de Alajuela, sin despertar alertas en la policía.
Las bandas conocidas como Búnker y Colores incluso etiquetaban sus productos con diferentes envoltorios. El objetivo era que los consumidores se pudieran decantar por uno o el otro vendedor.
Hoy el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuvo a 33 integrantes (25 hombres y 8 mujeres) de ambas agrupaciones delictivas. Las autoridades condujeron 44 allanamientos simultáneos, con la presencia de 450 oficiales. También participaron los grupos tácticos del Ministerio de Seguridad Pública (MSP) y la Municipalidad de Alajuela.
Los operativos se concentraron en Pueblo Nuevo, Desamparados y La Garita, del cantón central. Las capturas incluyen a los líderes de cada grupo:
- Espinoza Brenes (alias “José Bala”), de Búnker
- Solano Chaves (alias “Chochón”), de Colores
“Es particular, es diferente. Usualmente las bandas se enfrentan. Usualmente son aguerridas entre sí. Usualmente quieren monopolios. En este lugar habían llegado a una especie de acuerdo, de conciliación; para permitir que trabajaran y no despertar ningún tipo de alarma o sospecha”, explicó el director de la Policía Judicial, Wálter Espinoza.
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Estructuras similares
Marihuana decomisada a grupo criminal en Las Gradas de Pueblo Nuevo de Alajuela. (OIJ)
Espinoza destacó que las dos bandas se organizaban de forma similar:
- tenían un liderazgo sólido
- familiares se encargaban de las funciones de almacenamiento, preparación, distribución y venta de las drogas
Las organizaciones lograban la venta diaria de – droga principal, aunque no única – marihuana y crack, a través de jornadas de ocho horas y distribuciones prácticamente equitativas.
También mantenían vigilancia por los dos puntos de acceso a Las Gradas.
El jerarca mencionó que el reducido tamaño del sector de Las Gradas es uno de los motivos del pacto. “Es una zona muy cercana al centro de Alajuela, que podía generar que todos tuvieran ganancias sin necesidad de guerrear”, explicó.
Durante los allanamientos, el OIJ incautó:
- 4 kilogramos de marihuana
- 1 kilogramo de pasta de crack
- 200 piedras de crack
- 2 armas de fuego
- ¢6 millones en efectivo
Con la desarticulación de las agrupaciones se espera que disminuya la distribución de estupefacientes en el casco central de Alajuela y de delitos asociados, como los robos, asaltos y hurtos.
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Paulo Villalobos
