Desde la Columna
Por Marco Esquivel, abogado y aficionado de Alajuelense
Esta carta es el reflejo de la opinión de un liguista con base en lo vivido (y muy sufrido) no solo en el pasado torneo, sino en los últimos campeonatos a lo largo de estos seis años de sequía de títulos.
En mi opinión, es bastante claro lo que tienen que hacer los dirigentes si realmente quieren que el equipo vuelva a ser campeón alguna vez: dejar ir a jugadores que por más años que tengan en el equipo, no tienen suficiente calidad y más bien están quitándole la oportunidad a jóvenes para surgir. Aunque sea una decisión difícil, se deben separar pues en la cancha, en cada partido, demuestran que no están a la altura del club.
Christopher Meneses, Jose Andrés Salvatierra: los dos laterales jugaron la final contra el Herediano, teniendo en banca al argentino Facundo Zabala, notable lateral izquierdo. Es la prueba de lo que digo. Los florenses con jugadores jóvenes y rápidos como Berny Burke, Gerson Torres y Nextaly Rodríguez dejaron en evidencia que Meneses, Salvatierra e incluso Kenner Gutiérrez, no marcaron de cerca y con intensidad (en lugar de esperar), ante el temor de ser superados y que significaran una opción más peligrosa.
Allen Guevara, Alex López y Anthony López: Guevara ha dado muchos goles y asistencias al equipo, pero ya cumplió su tiempo en el equipo. Acumula años, falló oportunidades de goles clarísimas y se agotó en llevar oportunidades peligrosas. En ligas menores deben haber muchachos que nos puedan sorprender, como enseñó el Team con juventud.
Pineda fue clave durante el torneo y entregó goles regalados en la final. (Carlos González/Agencia Ojo por Ojo)
Alex López sin duda es talentoso, pero fue intermitente. Cuando más tiene que demostrar agallas, empuje y calidad, se pierde. ¿Para qué contratamos extranjeros si estoy seguro que en esas ligas menores tienen que haber otros que muestren lo que dio Bérnald Alfaro – de la cantera de Carmelita – en la final? Fue este quien superó la sombra de no poder anotarle a Esteban Alvarado en cuatro partidos.
Anthony López es joven y tiene potencial, pero le falta afianzarse y demostrar.
Los equipos competitivos son una mezcla de juventud con experiencia. Pero en la Liga desde hace seis años o más, se deben dejar ir a jugadores que ya cumplieron su ciclo, igual que le pasó a Patrick Pemberton. Su sucesor, el joven Adonis Pineda lastimosamente demostró que no tiene nervios de acero para partidos claves. Deberá trabajar su parte mental, pero ya arrancó mal el nuevo certamen.
Mauricio Vargas es excelente portero, con mayor confianza y aplomo, que debe asumir la titularidad.
Como aficionado, amante y practicante amateur del fútbol, visualizado que la separación de jugadores es el único camino. Los dirigentes manudos evitan esa opción de tocar a las “vacas sagradas” y se concentran únicamente en el clamor de la afición.
Queremos un juego constante, no echándose atrás como en la final pasada cuando arriba 2-0 y temporalmente campeones, el equipo dejó de atacar y buscar más goles. Se convirtieron en el cuadro vulnerable al cual un error compartido, nuevamente nos terminó dejando sin título.
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