Tomás Gómez
Aunque diversos organismos multilaterales ya anunciaron la disponibilidad de recursos para que los países enfrenten el coronavirus, el Gobierno costarricense envió una carta donde pide condiciones excepcionalmente beneficiosas para los Estados que accedan a los recursos.
El Poder Ejecutivo dirigió la misiva a la Organización de las Naciones Unidas, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y los bancos Interamericano de Desarrollo, de Desarrollo de América Latina y Centroamericano de Integración Económica.
El presidente Carlos Alvarado pidió aumentar los fondos que ayudarían a los bancos centrales en caso de crisis de reservas, así como intereses más bajos, plazos más amplios e incluso arreglos de pago.
“Ruego en este contexto flexibilizar las valoraciones sobre la situación fiscal de los países, de tal manera que se contemple un incremento del déficit siempre y cuando sea el resultado de esfuerzos para evitar la desaparición del parque empresarial y el empobrecimiento resultante del desempleo, vinculados al deterioro económico causado por la estrategia para combatir el COVID-19”, indicó el texto firmado por el mandatario.
Alvarado afirmó que hace la petición con la “autoridad moral” que le da la aprobación de la reforma fiscal en el 2018.
El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, apoyó la solicitud del presidente Alvarado.
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Instituciones ya tomaron medidas
El llamado del Gobierno tico llega luego de una quincena, en la que las mismas instituciones ya han aprobado medidas por el orden de los $32.000 millones para el combate del coronavirus.
El Banco Mundial y la Corporación Financiera Internacional (IFC) aprobaron un paquete de financiamiento de $14.000 millones, con desembolsos acelerados para ayudar a las empresas y los países en sus esfuerzos por prevenir, detectar y atacar la rápida propagación de la COVID-19.
Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) lanzó un plan coordinado de respuesta humanitaria mundial de $2.000 millones, que servirá para luchar contra el coronavirus en algunos de los países más vulnerables del mundo.
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En el caso del BID, se anunció que se pondría a disposición de los países hasta $12.000 millones que pueden ser destinados a la crisis y sus consecuencias.
El CAF otorgó a sus accionistas una Línea de Crédito de Emergencia de carácter contracíclico y rápido desembolso por hasta $2.500 millones, para apoyar y complementar las medidas fiscales que están aplicando los Gobiernos.
Finalmente, el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) destinará $1.910 millones para un plan de contingencia regional ante efectos del COVID-19. Este apoyo financiero ya inició su ejecución con la donación de $8 millones para los países de la región y el desembolso de los $90 millones para el fortalecimiento financiero de la banca estatal de Costa Rica.
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