Paula Ruiz
Los diputados aprobaron un proyecto de ley que modifica las fechas de las sesiones extraordinarias y ordinarias. Al tratarse de una reforma al artículo 116 de la Constitución Política, el miércoles dieron el tercer debate.
La iniciativa que fue impulsada por Eduardo Cruickshank, presidente del Congreso, con anterioridad, indica que las sesiones ordinarias y extraordinarias se distribuirán de la siguiente forma:
- Extraordinarias (del Gobierno): Del 1° de mayo al 31 de julio y del 1° de noviembre al 31 de enero.
- Ordinarias (en poder de diputados): Del 1° de febrero al 31 de abril, y del 1° de agosto al 31 de octubre de cada año.
Actualmente, esa distribución de los tiempos está de la siguiente forma:
- Extraordinarias: Del 1° al 31 de agosto y del 1° de diciembre al 30 de abril
- Ordinarias: Del 1° de mayo al 31 de julio y del 1° de setiembre al 30 de noviembre.
Gobierno tendría más tiempo de control
La iniciativa aprobada indica que el cambio de fechas comenzará a regir el 1º de mayo siguiente posterior a su publicación.
Si el Gobierno actual acuerda realizar el trámite desde el Ejecutivo para convertirlo en Ley de la República en los próximos meses, podría ser que en el 2021 ganen tres meses de sesiones extraordinarias.
Así las cosas, el Ejecutivo iniciaría el control a partir del 1° de diciembre de este año y culminaría el 31 de julio de 2021, situación que solo sucedería ese año por el reacomodo.
Pese a ello, la intención de Cruickshank es que este cambio sea para el próximo Gobierno, con tal de que a partir del cambio de administración, desde Casa Presidencial puedan enviar los proyectos de ley “que considera importantes para encausar su Gobierno”.
“Al iniciar en mayo con sesiones extraordinarias, cada nueva Administración y en particular, el nuevo Presidente de la República, podrá implementar su agenda de proyectos y contará con la posibilidad de promover su programa de gobierno en los primeros 100 días de estar en el poder”, explicó Cruickshank.
La organización de las sesiones del año legislativo data de la Constitución Política de Costa Rica de 1871. Esta Constitución en su artículo 78 establecía que el espacio de sesiones ordinarias se iniciaba el 1° de mayo, con una extensión de sesenta días, prorrogable por un mes más, sólo en caso de ser necesario. El resto del año, sesionaba por convocatoria del Poder Ejecutivo.
Para 1949, en la Asamblea Nacional Constituyente, se incluyó la distribución de sesiones ordinarias y extraordinarias pero con la concepción de que el trabajo ordinario del parlamento era limitado y la potestad del Poder Ejecutivo de convocarlo era discrecional; criterios muy distantes a la realidad actual.
