Tomás Gómez
Sin decorar sus palabras, Michael Soto admite cuando existe algún tipo de problema en el ministerio que dirige.
Así lo tuvo que hacer esta semana, cuando la cifra de asesinatos en tan solo 16 días llegó a a 43.
Hasta el presidente Carlos Alvarado pidió cuentas por la situación, ante lo que Soto apareció para anunciar uno de sus ya famosos megaoperativos.
“Yo ya le había dicho que veníamos con un problemita, entonces me pidió que le explicara cómo estaba la situación. Entonces yo le expliqué lo que ha estado pasando y las medidas que vamos a tomar”, comentó.
El agente Soto
La cara de Michael Soto ya era conocida en las noticias antes de ser designado ministro.
Una trayectoria de 25 años en el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) lo tuvo frente a las cámaras como vocero de los diferentes departamentos que tuvo a su cargo.
Dirigió la sección de homicidios primero y luego la de estupefacientes.
De ahí pasó la Oficina de Planes y Operaciones, cargo que compartió con la subdirección interina del Organismo.
En esa silla estaba este abogado y criminólogo cuando Carlos Alvarado lo convenció de cambiar el Poder Judicial por el Ejecutivo.
Del OIJ a Seguridad
A diferencia de su trabajo en el OIJ, donde analizaba los delitos ocurridos, ahora a Soto le toca prevenir y combatir los ilícitos.
En esa ruta se ha valido de los megaoperativos como herramienta para mejorar las estadísticas de seguridad del país.
La estrategia consiste en concentrar a diferentes ramas de la policía para supervisar diversos temas de legalidad.
Así, se dan retenes, revisiones, decomisos y otra serie de acciones de las que resultan hallazgos de drogas, armas, personas con deudas pendientes ante la justicia o en condición migratoria irregular.
Aunque los actos de esta semana fueron anunciados, en otras ocasiones se realizan de sorpresa.
Estos se han dado en todo el país y algunas veces se especializan por temas, como los que se han desarrollado en temas turísticos.
Estadísticas, datos y números
En sus mensajes los números tienen siempre un lugar importante.
Tras las operaciones de esta semana para frenar la escalada de violencia, el jerarca compartió con la prensa un mensaje en dicha línea.
“Realizamos el megaoperativo número 84”, dijo.
“Debemos de reconocer que tuvimos un pico alto en el tema de homicidios comparado año con año, a la misma fecha, tenemos menos 39 homicidios. Eso es importante, hay que trabajar muy duro para sostenerlos”, agregó.
El ministro de las huelgas
Cuando Soto cumplía apenas un trimestre en el cargo, justamente hace un año, tuvo su primer enfrentamiento con las huelgas, otro de los temas que ha marcado su gestión.
Fueron tres meses en los que los sindicatos intentaron, sin éxito, combatir el Plan Fiscal realizando bloqueos, intentando quitar las vallas que protegían la Asamblea Legislativa y hasta haciendo zumba en medio de las calles.
La calma parecía haber vuelto y entonces llegó junio con un combo de protestas por los más diversos temas.
Colegiales y traileros se aliaron para reclamar por temas tan disímiles como la educación dual y las tasas de ingreso que exigía Nicaragua.
Nuevamente las calles quedaron cerradas por días, dejando frenados el transporte y las exportaciones.
Aunque finalmente se dio la intervención de los bloqueos, las acciones no convencieron a la Sala Constitucional, quien recientemente condenó al Estado por no garantizar la libertad de tránsito.
Al respecto, Soto indicó que pedirá a los magistrados una ampliación de la sentencia para conocer cuales son los límites en que podrán retirarse los bloqueos.
Sobre las huelgas el Ministro también habló esta semana, indicando que su atención está demandando recursos que podrían destinarse a la atención de delitos.
¿Logrará la meta?
En medio de sus mea culpas, cuando Soto habla siempre deja ver un optimismo por reducir los índices de seguridad.
El Ministro insiste en que los números del 2019 vienen mejores que los del 2018 y que se hará un esfuerzo por mantenerlos.
Para lograrlo, tiene por delante los tres meses y medio que le restan al año, en los cuales se deberá continuar con la prevención de delitos y para los cuales ya se anuncian más protestas por el Seguro Social, la Regla Fiscal y la Ley de Huelgas.
