Juan Pablo Arias
Los aumentos durante abril en el costo de la electricidad, los combustibles y los automóviles, fueron los principales determinantes de una variación de medio punto porcentual en el Índice de precios al consumidor (IPC), el indicador utilizado para estimar la inflación.
De acuerdo con información suministrada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), la variación mensual en el nivel general de precios fue de 0,56%, el cambio más alto de los últimos 5 años para el cuarto mes.
Con este aumento, la variación interanual llegó a 2,07% e ingresó al rango meta definido por Banco Central en el Programa Macroeconómico 2019-2020, entre el 2% y el 4%.
Esto significa que por cada ¢1.000 que se gastaban en compras un año atrás, hoy se tendría que desembolsar ¢1.020,7.
Desde el 18 de abril pasado un grupo de bienes empezaron a pagar el Impuesto de Ventas, al salir de la canasta básica tributaria. Este efecto se manifestaría en el indicador de mayo.
El 1º de julio próximo comenzará a regir el Impuesto al Valor Agregado. Con la entrada en vigor de esta reforma, se espera un incremento extraordinario, pero transitorio en el nivel de precios.
